Con el estruendo de cohetes, en un ambiente colorido, cargado de alegría, fervor, devoción, arte y cultura, así fue recibido Santo Domingo de Guzmán en Las Sierritas, luego de pasar 10 días en la capital.
Miles de managuas caminaron en romería junto a la imagen en su regreso este 10 de agosto, vistiendo trajes folclóricos, camisetas, cintas de colores, sombreros alusivos a Minguito, o representando a personajes tradicionales de estas fiestas, pagando promesas, agradeciendo por los favores concedidos.
En cada trayecto, la imagen era esperada por los promesantes con aplausos, alzando pañuelos, gritos de alegría y bailando, viviendo en algarabía una de las fiestas populares más representativas y concurridas de la capital.
Desde La Morita, la alcaldesa de Managua, Reyna Rueda y el vicealcalde de Managua, Enrique Armas acompañaron a los promesantes para despedir a Santo Domingo de Guzmán en un derroche de cultura al son de filarmónicos.
La imagen de Minguito, adornada con flores amarillas y blancas fue llevada por el Comité de Cargadores Tradicionalistas, quienes salieron de la iglesia Santo Domingo en Managua, pasando por el Gancho de Caminos, Cristo del Rosario, Cristo Rey, calle de Altamira hasta la Colonia Centroamérica.
El trayecto continuó por la carretera a Masaya, hasta La Morita, siguiendo por los Cinemas Camino de Oriente, enrrumbando los antiguos caminos carreteros, la tradicional rozada del camino, pasando por La Cruz del Paraíso hasta llegar a Las Sierritas, su morada.
Estas fiestas tradicionales que se vivieron en tranquilidad y paz se garantizó la seguridad y orden con la presencia de la Policía Nacional, Cruz Roja y Bomberos. La Alcaldía de Managua también garantizó la limpieza en estas festividades.
La alcaldesa de Managua, Reyna Rueda destacó que estas fiestas tradicionales y patronales se vivieron en paz, armonía y tranquilidad.
“Estas fiestas se viven en felicidad y armonía, en alegría de vivir en paz, de disfrutar nuestras riquezas tradicionales, en armonía, unidad sobre todo, y esa ha sido nuestra práctica que nos ha caracterizado a los nicaragüenses, como un pueblo de paz y cristiano”, aseguró.
Apuntó que las familias tienen la confianza en el Buen Gobierno que promueve, fortalece la paz y la unidad y dedica ese amor y cariño para el bienestar de las familias, “uno de las restituciones de derechos, es el rescate y fortalecimiento de nuestra cultura, tradición, creencia, gastronomía, nuestra danza, baile y música y realmente ha sido un esfuerzo de nuestro Buen Gobierno”.
Recordó que estas fiestas que se desarrollaron en seguridad y en paz, se ha hecho un esfuerzo interinstitucional para realizar un calendario de muchas actividades, concursos municipales y distritales.
Promesantes cumplen con amor y devoción
Los promesantes compartieron los milagros recibidos, además recordaron que estas fiestas son heredadas de generación en generación.
“Yo sufrí 2 infartos y el Señor y Santo Domingo me dio la oportunidad de seguir con vida y por eso vengo con satisfacción y alegría a pagarle promesa, porque me levantó con fe y devoción”, dijo doña Elizabeth Mayorga.
Acompañada de sus nietos, doña María Elena Prado, pobladora del barrio La Luz llegó a la Rotonda Cristo Rey a despedir a la venerada imagen.
“Siempre lo venimos a encontrar y llevarlo hasta Las Sierras. Hoy estos caminos son carreteras, pero antes eran zanjones y así nos íbamos desde mañana a encontrar al santo y hoy en día, nosotros debemos conservar nuestras tradiciones como nicaragüenses, nuestras raíces culturales”, expresó.