Cuando en 1523 los invasores españoles pisaron el suelo nicaragüense por primera vez, no esperaban encontrar una civilización organizada, orgullosa y valiente.
En un mundo donde los pueblos claman por justicia, paz y soberanía, ¿de qué nos sirve un organismo como las Naciones Unidas que ni escucha, ni actúa, ni resuelve?
En Tulsa, Oklahoma, Bernie Sanders detuvo su discurso y alzó la voz. Le acababan de informar que Trump había ordenado bombardeos contra Irán. “¡No más guerras!”, gritó. La multitud estalló.
Conversaba con unos amigos sobre la necia postura de individuos que desde afuera insisten en dar patadas contra el aguijón contra cualquier circunstancia .
Este domingo, Nicaragua honra el nacimiento de una mujer que ha entregado su vida entera a la defensa del pueblo, de la soberanía y de la esperanza. Rosario Murillo, Copresidenta de la República.