Con el respaldo del Buen Gobierno Sandinista, una brigada de médicos voluntarios estadounidenses se encuentran en Nicaragua desarrollando una jornada de cirugías pediátricas de columna vertebral en el Hospital de Referencia Nacional Fernando Vélez Paiz.
Esta labor altruista de la Brigada SpineHope tiene como objetivo transformar la vida de numerosos niños y niñas que enfrentan dificultades severas, debido a malformaciones o lesiones en la columna vertebral.
El equipo médico ha realizado ya con éxito más de 40 intervenciones que han permitido a los pequeños pacientes recuperar su movilidad y mejorar su calidad de vida. En esta cuarta jornada serán 10 los protagonistas procedentes de diferentes partes del país que serán operados.
Yurielka Tinoco Barreda, de 17 años, es originaria de Rosita en el Triángulo Minero y una de las niñas que será intervenida tras recibir una serie de análisis y evaluaciones. Ella fue diagnosticada con escoliosis desde los 10 años.
“Tener escoliosis es una enfermedad que afecta el cuerpo, tanto físicamente, psicológicamente y mentalmente, porque al tenerla la vida no es igual como la de los demás. En ocasiones me siento diferente, porque los demás niños son normales con su columna vertebral”, indicó.
Esta paciente y su mamá Nora Maribel Barreda se mostraron agradecidas con el Buen Gobierno y la atención recibida en el hospital. Además están muy contentas porque su tiempo de espera ha terminado, “yo le agradezco a Dios por la oportunidad que hoy tengo de ser operada”, refirió. Yurielka.
Doña Maribel compartió que para una madre es difícil porque es una niña adolescente que desea sentirse feliz, tranquila y ser como las demás niñas.
“Ha sido una lucha con ella, pero hoy en día me siento agradecida porque la vida de ella y la mía va a cambiar también para bien, gracias al Gobierno que se esfuerza para que la brigada venga y hagas estas maravillas como las que está haciendo”, afirmó esta madre muy emocionada.
Alexa María Rivas Mairena, de 8 años, es de Managua y otra de las valientes niñas que será intervenida por escoliosis idiopática. La pequeña dijo sentirse feliz por la operación que se le practicará y que tras su proceso de recuperación podrá realizar actividades de su edad que le encantan como “pasear y jugar”.
Su papá es Winston Alexander Rivas y manifestó que se siente alegre y feliz, “es algo que venimos esperando desde hace 6, 7 años, luchando, buscando medios para que ella pudiera tener una operación así”, afirmó.
Compartió que desde los 2 años empezaron a tratarla en el Hospital cuando vieron que en su espalda tenía un bulto que no era normal.
Otro caso es el niño Elías Josué López Pérez, de 15 años y originario de Matagalpa, quien ya fue operado por escoliosis severa.
“Ahora que estoy operado me siento alegre, gracias al Comandante Daniel, ahora toca recuperarme para después irme a la casa”, puntualizó.
Su mamá Flor de María Pérez expresó que antes era muy triste verlo sufrir.
“Me siento agradecida con Dios y el Gobierno porque facilitó la entrada a este programa de SpineHope que es para operar a niños con este problema de escoliosis, que es muy triste, porque solo ellos sienten en su cuerpo los síntomas que presentan”, dijo Pérez.
“La operación ha sido exitosa, porque lo veo que está normal, ha respondido y se espera ver más en su proceso futuro”, añadió.
Pacientes llegan a tener una vida normal
La doctora Virginia García, directora del Hospital, expresó que con estas cirugías sentirán que los dolores irán disminuyendo gradualmente y tienen una vida normal ya después de los 2 meses.
Explicó que por el dolor que les genera los niños no juegan ni corren, la columna se desvía y puede causar problemas para respirar.
“Como Hospital de Referencia para estos casos nos visitan bastante, en el lado del norte y occidente es donde más se ven estos tipos de pacientes”, señaló.
A la vez, mencionó que desde el 2022 que iniciaron las cirugías con el acompañamiento del Gobierno de Palestina, han tenido 45 niños con cirugías exitosas.
“Nosotros lo que hacemos es captar a los niños, hacerles estudios especiales, como resonancia magnética para ver qué tanta compresión tienen de los nervios en la columna, ver qué tan desviada está, entonces es un proceso”, afirmó.
Las cirugías de columna vertebral tienen un alto costo que puede llegar a los 100 mil dólares en el extranjero, en Nicaragua como parte de la política del Buen Gobierno de restitución de derechos a la salud, éstas son realizadas gratuitamente y forman parte de un esfuerzo conjunto entre las autoridades nicaragüenses y los profesionales de la salud voluntarios, quienes han puesto su experiencia al servicio de quienes más lo necesitan.
Enseñanza y cirugías
El anestesiólogo de SpineHope, Jorge Abel Guerrero, manifestó que de las cirugías realizadas al momento los pacientes han estado estables.
“La misión de SpineHope no es solo venir a hacer cirugías, sino ayudar a los cirujanos de aquí. Siempre vamos con un cirujano que nos proporcionan como huéspedes aquí en su país, hacemos enlaces y posteriormente no solo a cirujanos, sino a anestesiólogos y en general al equipo de quirófano para que en el futuro sean autosuficientes, enseñamos y luego que están listos buscamos otra sede”, sostuvo Guerrero.
El equipo médico también realizó clínicas de evaluaciones a los pacientes que serán intervenidos y otros que serán intervenidos próximamente o bien que se les puede ofrecer si no requieren de cirugía.
La duración de cada cirugía conlleva entre 4 y 6 horas, dependiendo de la complejidad del paciente. Su recuperación es gradual iniciando el siguiente día para ponerse en pie, luego a la tercera semana ya pueden hacer actividad moderada y a las seis semanas puede caminar normal. Ya a los 6 meses podrán realizar deportes y otras actividades que antes no podían, sin limitaciones.
Guerrero agradeció al Gobierno de Nicaragua por el apoyo que se les ha brindado a través del Ministerio de Salud.
A seguir sus sueños
Estos niños tienen muchos sueños por cumplir que anhelan hacer realidad tras recuperarse de su cirugía.
“Yo ya saqué mi bachillerato y este año no he podido estudiar debido a mi proceso en la operación y cuando me recupere poder estudiar, trabajar, cualquiera de las dos cosas”, dijo Yurielka.
En el caso de Elías Josué López este niño expresó: “Voy a estudiar una carrera de Médico Forense”.