La producción de raíces y tubérculos, muestra resultados positivos, principalmente en el cultivo de yuca, con mayores rendimientos, y la malanga, que registró la mayor área sembradas en la zona de Matagalpa y Jinotega.
En el caso del quequisque, se muestra una reducción en comparación al ciclo anterior, ya que la producción se basó en abastecer el consumo nacional debido a la variabilidad de la demanda de este producto en el mercado internacional.
La yuca registró buena salida de cosecha con 4.6 millones de quintales, 4% superior a lo registrado en el ciclo anterior, que fue de 4.4 millones de quintales. Esto asegura un buen abastecimiento en los mercados y bajos precios.
Este crecimiento de la producción refleja el esfuerzo de las familias en el manejo del cultivo, ya que en menor área sembrada se obtuvieron mayores volúmenes de producción.
En el caso de la malanga, la producción fue de 684 mil quintales, mostrando crecimiento del 3% en relación al ciclo anterior, que fue de 663 mil quintales. El estudio registra que este crecimiento se debió a mayor número de área en Matagalpa y Jinotega, permitiendo abastecer el consumo y bajar los precios.
El quequisque registra una producción en el ciclo de 285 mil quintales, 69% menor al ciclo anterior, que fue de 938 mil quintales.
Cabe mencionar que este rubro se cultiva en pequeñas áreas y la falta de manejo agrícola en las plantaciones hace que las cantidades producidas sean para el consumo nacional, ya que en los últimos dos años se ha presentado variación en la demanda del mercado externo.