La Vicepresidenta Compañera Rosario Murillo, reflexionó sobre la paz y los valores que deben ser defendidos todos los días por las familias que de verdad aman a Nicaragua.

"Buenas tardes queridas familias de esta patria bendita, esta patria que camina, que avanza, esta patria donde aprendemos todos, todos los días, a vivir mejor, a vivir con la mente y el corazón tranquilos, a vivir con seguridad y tranquilidad, a potenciar que quiere decir incrementar todos los días la concordia, a defender la paz que tanto nos ha costado a todas las familias nicaragüenses que disfrutamos de paz y que defendemos la paz. Primero porque es el mandato cristiano por excelencia, la paz, la fraternidad, la solidaridad, el cariño. Y primero también porque es en paz, con  seguridad, con tranquilidad que podemos dedicarnos más al esfuerzo que es victorioso, que es exitoso, trabajar para prosperar, de estudiar, de aprender, de emprender para prosperar", expresó.

"Sin paz no hay vida. Sin amor no hay vida. Paz y amor son aliento fundamentales de la existencia humana. Paz que es amor y amor que es paz, porque defendemos la paz cuando nos queremos, porque nos queremos, por eso decimos son una cara de la misma moneda. Y esa moneda es precisamente la verdadera doctrina cristiana, que nos enseña, que nos mandata, que nos dice: Amor al prójimo. Amarás a tu prójimo como a ti mismo.  El mandato cristiano no dice odiarás a tu prójimo, matarás a tu prójimo. No, no dice eso. Destruirás a tu prójimo. No. El mandato cristiano es amar al prójimo y vivir como hermanos. Y cuando nos amamos, cuando vivimos como hermandad, precisamente entonces es que estamos cumpliéndole a Cristo Jesús y podemos llamarnos cristianos de verdad, no solo del diente al labio o de ornamento, no, de verdad, porque vivimos ese cristianismo, ese cristianismo portentoso y poderoso que nos asegura conducta solidaria, fraternal, conductas que van más allá del egoísmo, más allá de las ambiciones que muchas veces son  funestas, más allá de esas conductas inapropiadas también que ahora en la modernidad se llaman conductas inapropiadas que conocemos y vemos, que ya en el mundo no hay silencio sobre esas conductas inapropiadas. Al contrario, así como se condenan los crímenes de lesa humanidad, así también se demanda juicio, condenas para quienes practican vicios, conductas inapropiadas, incluyendo desgraciadamente hasta menores de edad", agregó.

"Lo sabemos, lo hemos visto. Y conductas inapropiadas son también aquellas que mueven a personas que dicen representar credos, líderes de fe les dicen, y en estado alcohólico, en estado etílico se personan y a gritos pretenden hacer su gusto, violentando las leyes. Todo eso, lo vemos y lo vivimos. Y para todo eso tenemos leyes, tenemos condenas. La sociedad, en general las familias que se preocupan de esas conductas porque son lesivas del respeto a la dignidad humana, protestan, qué quiere decir protestan, manifiestan su desacuerdo y piden que ... todos somos iguales, entonces como todos somos iguales todos tenemos que cumplir con las leyes, observar las leyes. Y todos sabemos de qué estamos hablando. Todos sabemos", dijo la Vicepresidenta.  

La Compañera Rosario Murillo, recordó que "lo importante en estos días de celebración  y agradecimiento a Dios por la paz y el bien es estar conscientes de que la perfección no existe, estar conscientes de que debemos todos los días trabajar para ser mejores y estar conscientes de la obligación que tenemos todos los ciudadanos en cualquier parte del mundo de cumplir con las normas de convivencia elementales y cumplir con las leyes, todos sin excepción".

Son "días intensos hoy, días intensos ayer, probablemente días intensos mañana. Un mundo lleno de complejidades, de retos, de desafíos, un mundo que no podemos negar porque en este mundo vivimos, es el que habitamos, es el único que tenemos, pero sí debemos cuidar en todos los sentidos, culturales, espirituales, naturales que quiere decir madre tierra y derechos. Un mundo donde debemos cuidar no solo la forma sino el fondo, es decir los contenidos, es decir los valores, es decir los ideales. Y que quienes se llenan más la boca, presentándose y posicionándose como perfectos en cualquier parte y más aún los imperios, sepan que el mundo entero sabe de las atrocidades cometidas por los autollamados perfectos en todas partes del mundo. Así que tenemos ojos en el corazón, en el alma, ojos para la visión, ojos para ver, ojos para seguir viendo y ojos para caminar, para no perdernos, para estar claros. La conciencia que crece entre los pueblos del mundo. Las apariencias son engañosas. Las apariencias engañan por eso siempre pensamos y vivimos de acuerdo a realidades. El mundo está cambiando, sigue cambiando, todos los días cambia el mundo. Y Dios quiera que estemos caminando con esfuerzos de la familia humana, de la comunidad humana, a un mundo mejor, hacia un mundo distinto, hacia un mundo de verdad liberador, en todos los sentidos".

Son "días intensos para valorar lo que tenemos en este país pequeño, pero lindo, hermoso, lleno de humanidad, para valorarlo y para defenderlo y para no permitir que nadie se atreva a alterar la paz y el derecho a la tranquilidad, a la seguridad, y a construir bienestar todas las familias nicaragüenses", aseguró.

"Hay que decirlo claramente. Aquí la condena es general a quienes se atrevieron a alterar la paz, a romper la paz, a matar la paz y a matar seres humanos. La condena es general, nadie en un país que ha sufrido tanto, puede querer ese tipo de incidentes que más bien consolidaron esa conciencia de urgencia de paz, urgencia cotidiana de paz", indicó.

En ese sentido, proclamó que "estamos en abril y abril está hecho para vivir tranquilos".

"Abril es para crecer cultural y espiritualmente, tomando nota de todo lo que cuenta, de todo lo que vale realmente que no es únicamente lo que hace a algunas personas sentirse poderosos, el dinero, y autorizados, sentirse poderosos y autorizados porque se engañan, porque creen mal, poderosos y autorizados a matar, poderosos y autorizados a llenar las calles de violencia. Poderosos y autorizados a manipular personas, familias pobres, a manipular y a pagarles a quienes manipulaban para servirles a ellos y a través de ellos a los imperialistas de la tierra".

"En Nicaragua nunca más. Somos un  pueblo digno. Conciencia de dignidad y de honor nacional. Somos un pueblo con conciencia y luchas intensas, sacrificios grandes de miles de familia para preservar soberanía. Nobles propósitos y nobles prácticas. Esa es Nicaragua. No esa que quisieron vendernos los potentados y los empleados de los potentados cuando levantaban la mano para decir que sigan los crímenes, que siga la violencia, con una arrogancia y un sentido de superioridad, típico de quienes se engañan creyendo que lo que vale no es al alma, no es el ser humano, no es la humanidad, no son  los derechos, no es la dignidad, no, que lo que vale son los cuatro pesos que además les dan, para destruir. Ayer dijimos y lo decimos todos los días, con mucho énfasis, ni perdón ni olvido para los criminales, ni perdón ni olvido para los terroristas, para los sanguinarios, para los promotores del horror, de la zozobra. Ni perdón ni olvido, para quienes rompieron la paz tan preciada en un pueblo que ha sufrido tanto. Ni perdón ni olvido para los que mienten, engañan, falsos, y falsos también como profetas o como pastores, ni perdón ni olvido para los que profanaron, los que blasfemaron, los que pronunciaron el nombre de Dios en vano", manifestó.

Indicó que "aquí sabemos lo que hemos vivido, aquí todos nos conocemos. Sabemos qué pasó y qué pretendieron que siguiera pasando. Aquí sabemos quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos. Aquí sabemos que en Nicaragua, gracias a Dios, el Dios verdadero, Dios verdadero de Dios verdadero, que en Nicaragua queremos, exigimos, merecemos la paz, el bienestar, la alegría, la tranquilidad que tenemos y continuar trabajando para vencer la pobreza. En Nicaragua estamos claros. Quienes no están claros, unos cuantos, unos cuantitos, no están aquí y si acaso queda por ahí algún rezagado, bueno ya sabe pues, que las mayorías queremos paz, paz y bien, paz y vida digna, paz y bienestar, trabajo, educación, salud, seguridad, seguridad humana, desarrollo con  justicia, queremos paz, y queremos en este abril todos los días, de rodillas darle gracias a Dios, porque el Dios verdadero, no los falsos, el Dios verdadero se impuso y nos iluminó y nos guió para recuperar la paz que los criminales, porque eso es un crimen atentar contra la paz de un pueblo sencillo, bueno, la paz que los criminales, como dijimos ayer, masacraron".

"Pero bueno, el Señor, nuestro Dios nos da fuerza a todos y nos ha dado fuerza todo este tiempo para trascender, para aprender, para crecer y para saber cuáles son nuestras riquezas, la paz, el cariño, el respeto, la fraternidad, la solidaridad. Cuáles son nuestros haberes, cuáles son esas bases de un capital moral invencible el que tiene nuestro pueblo. Nos queremos, queremos defendemos y exigimos el derecho de vivir en paz, nos queremos y custodiamos celosamente esta concordia que nos permite ir poco a poco. Imagínense cómo estaríamos si no nos hubiesen arrebatado a sangre y fuego los logros, cuántos miles de millones le arrebataron al pueblo los criminales, los terroristas, falsos, cuántos miles de millones. Pero bueno, este pueblo trabajador que merece tanto un lugar de gloria en la historia ha venido con el esfuerzo cotidiano, con la integridad, con la responsabilidad, con la laboriosidad, generando más y más victorias que son suyas, que son del pueblo presidente", concluyó.

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