La compañera vicepresidenta Rosario Murillo, anunció que el Centro de Salud de Monimbó, destruido por el golpismo terrorista el año pasado, será reinaugurado este jueves tras ser reconstruido totalmente.
La compañera Rosario Murillo dijo en su mensaje de este mediodía que las obras de remodelación, ampliación y equipamiento han sido concluidas y se trabaja en los últimos detalles.
“¿Quién destruyó ese Centro de Salud? Todos lo sabemos. ¿Quién quiso destruir Nicaragua? Todos lo sabemos. ¿Quién quiso cubrir Nicaragua con un odio nunca visto? Todos lo sabemos. ¿Quién traicionó a las familias nicaragüenses? Todos lo sabemos. ¿Quién quiso retrasar los avances que traíamos? ¿Quién atrasó esos avances? Todos lo sabemos”, reflexionó la compañera Rosario Murillo, vicepresidenta de la República.
“¿Quiénes son culpables de tanto crimen, de tanto dolor, de tanto sufrimiento? Todos lo sabemos. Todos lo sabemos. Justicia y reparación, hemos dicho tantas veces y sabemos que llegará el día. No repetición, no repetición, el amor es más fuerte que el odio y con amor y fe cristiana estamos venciendo”, añadió la compañera Rosario.
“Allá, quien quiera, allá quien desde un corazón que no entiende ni la vida ni el amor, ha traicionado los principios y los valores de Cristo Jesús que reina en nuestros corazones, y en nuestra patria, en nuestro suelo, en nuestro cielo”, prosiguió.
La compañera Rosario Murillo señaló que “hubo quienes traicionaron a Cristo porque traicionar al pueblo es traicionar a Cristo. Destruir es traicionar a Cristo. Matar, quinto mandamiento, no matar, matar, asesinar, secuestrar es traicionar a Cristo”.
Traicionaron a Cristo desde hábitos cristianos
“Y lo triste es que se traicionó a Cristo desde hábitos cristianos, dicen. Desde personas que se decían consagradas. Se decían, todavía se dicen algunos. Pero todos sabemos que en Nicaragua vive y reina Cristo Jesús y precisamente, desde ese amor y desde esos valores cristianos, podemos ir adelante con esta milagrosa, prodigiosa, restauración de nuestro país, de la paz, del trabajo, del trabajo”, resaltó.
Dijo que no pudieron, porque el odio no puede, no prevalece. “Los malos corazones no prevalecen. No pudieron ni podrán. Nicaragua vive en amor. Quiere amor y paz. Nicaragua va adelante porque todos los hijos de esta patria sagrada amamos a nuestra Nicaragua, nos sentimos orgullosos de nuestra Nicaragua y construimos paz, trabajo, seguridad, bien, todos los días”, enfatizó.
“Ese es el sentido de la vida, con humanismo, construir paz, bien, derechos, bienestar, desde la dignidad y el respeto, todos los días, ese es el sentido de la vida, no otra cosa”, indicó la compañera Rosario.
Señaló que destruir, pretender destruir, amenazar, acosar, asediar, acechar, no es de cristianos.
“En este país vivimos familias cristianas, somos solidarios, nos sentimos orgullosos de nuestro talento, de nuestra inteligencia, de nuestra capacidad, de nuestra laboriosidad y bendecidos, porque sabemos que Dios derrama sus milagros sobre esta tierra”, dijo.
“Por eso nos hemos restaurado, por eso nos hemos recuperado, en milagros, en bendición, en prosperidad y en victorias”, prosiguió la compañera Rosario Murillo.
Mañana inician los trabajos de instalación de todos los equipos en el centro de salud de Monimbó y el jueves se inaugura, reiteró.
“Honor y gloria a los trabajadores de la salud, honor y gloria a las comunidades valientes, amorosas de nuestra Nicaragua. Paz y bien y que Dios Nuestro Señor conceda paz a los poquísimos corazones tóxicos que hay en nuestro país”, expresó.
“Que Dios Nuestro Señor les conceda paz, entendimiento, y sobre todo sensibilidad para verse en el espejo de los demás. Amor al prójimo, eso le pedimos a Dios Nuestro Señor este fin de año, esta Navidad”, dijo.
“Que Él con su potencia, con su omnipotencia les conceda paz a esos cuantos, a esos pocos, les conceda paz para garantizar que la armonía, o la desarmonía que todavía hay en esos poquitísimos, de lugar al respeto, a la solidaridad, a la generosidad, y a la sensibilidad sobre el derecho de todos, que es el derecho, que es la única posibilidad de la paz. El reconocimiento del derecho de todos a vivir con dignidad y a vivir construyendo, patria, paz, prosperidad”, comentó la compañera Rosario Murillo.