El Presidente Daniel Ortega durante el acto de Estado en ocasión del 43 aniversario del paso a la inmortalidad del Comandante Carlos Fonseca indicó que su legado está presente en cada una de las batallas por mejorar las condiciones de las familias “y no solamente en la batalla de Nicaragua, en la batalla de América Latina, en la batalla en el mundo por la paz, ahí está presente Carlos”.
La Unidad de la Patria Grande
Y ese pensamiento de Carlos Fonseca seguirá inspirando y llenando de fortaleza espiritual en las actuales y próximas batallas por fortalecer la unidad de América Latina y el Caribe.
“Ya no son aquellos tiempos difíciles donde estaba aislado al momento de su tránsito a la inmortalidad. Ya América Latina y el Caribe ha tenido cambios. Es cierto, no ha sido fácil esta batalla. Después de la Revolución Cubana, cuando se decía que ya no se volvería a producir otro hecho revolucionario como el de Cuba, 20 años después, en julio del 79, triunfa la Revolución Popular Sandinista y en esta plaza aquí estaban y están nuestros héroes, nuestros próceres y aquí estaba Carlos y estaba Sandino, y estaba Zeledón y estaba Andrés y estaba José Dolores Estrada y Tomás Ruiz y Diriangén. Aquí están con esa fuerza que es lo que explica la fortaleza espiritual que tiene nuestra juventud, la fortaleza y el vigor espiritual que tiene nuestro pueblo a pesar de estar en condiciones que no son de opulencia”, sostuvo.
Y a pesar de no estar en las mejores condiciones económicas, destacó que en la gran mayoría del pueblo nicaragüense existe una gran moral.
Los vende patrias de ayer son los mismos de hoy
“Hay una gran fortaleza moral, una gran dignidad como pueblo en la mayoría de los nicaragüenses. Sabemos que siempre está la excepción entre los que no tienen sentido de dignidad, de los vendepatrias de ayer, que son los mismos vendepatrias de hoy, y que seguirán siendo vendepatrias. Ahí cuando estén en el infierno, ahí van a andar buscando como vender al diablo”, dijo.
Afirmó que en este 8 de noviembre que se conmemora el 43 aniversario del tránsito a la inmortalidad del comandante Carlos Fonseca Amador, los pueblos de América Latina y el Caribe están en medio de una gran batalla contra las políticas injustas del neoliberalismo. Hizo ver que en la década de los 80, Cuba, Nicaragua, Granada y luego Panamá con el general Omar Torrijos estaban luchando aislados y con agresiones imperialistas.
En el caso de Nicaragua, subrayó que la Corte Internacional de Justicia condenó al gobierno de Estados Unidos por la guerra impuesta a nuestro país. “Ese fallo está vivo, esa sentencia está ahí viva, llegará el día, y yo no me cansaré de cobrarle a los Estados Unidos, llegará el día en que tendrán que pagar esa deuda que tienen con Nicaragua”, afirmó.
“Y en medio de estas oleadas de gobiernos de derecha, en medio de un momento de fortalecimiento de gobiernos progresistas, de gobiernos de izquierdas, yo diría que hoy para la alegría de Carlos, de Sandino, de Zeledón, tenemos una América que está sacudiéndose, se está sacudiendo. Los hermanos de la República Bolivariana de Venezuela, la tierra de Bolívar, la tierra de Chávez, resistiendo con todo el coraje que da la dignidad y la seguridad de la lucha por la justicia y por la paz y eso explica por qué Venezuela le provocó una gran derrota y una gran vergüenza al imperio yanqui y a su ficha cuando fue electa para el Consejo de los Derechos Humanos de Naciones Unidas. Y Cuba, cuanto más agredida, más valiente, más resistente la Cuba de Martí, de Fidel, de Raúl, de Díaz Canel. Y en Naciones Unidas, ayer mismo, la inmensa mayoría de las naciones del planeta que están en Naciones Unidas, 187 naciones de nuestro planeta, votaron en contra del bloqueo a Cuba. ¡Que se levante ese bloqueo criminal que viola los derechos humanos del pueblo de Cuba!”, exigió.
También calificó como otra gran victoria la puesta en libertad del expresidente de Brasil Luiz Inácio “Lula” Da Silva.
“Y al final, Lula saliendo con esa vitalidad, con esa fortaleza, con ese coraje, con ese espíritu que no lo ha perdido a pesar de la cárcel y de la injusticia que se ha cometido con él. Para Lula todo nuestro cariño, para su pueblo, para el Partido de los Trabajadores todo nuestro cariño hermano Lula”, resaltó el dirigente sandinista.
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Igualmente, destacó los cambios importantes de gobierno en algunos países en los que han triunfado fuerzas políticas que no están dispuestas a someterse a los dictados del imperio.
“El gobierno presidido por el presidente Andrés Manuel López Obrador parte del principio de la doctrina Estrada y es que el respeto al derecho ajeno que es la paz. Y los resultados de las elecciones en Argentina, presidente Alberto y Cristina (Fernández) que han logrado una gran victoria, y estamos seguros de que va a contribuir a enfrentar los retos, los desafíos que tiene la nación Argentina, o sea, son cambios de dos naciones México y Argentina, dos naciones grandes, y ahora en Brasil con la salida de Lula, si fuera a una elección ahorita seguro que Lula gana la elección, barre en la elección, seguro”, refrendó el comandante Daniel Ortega.
Una batalla en Bolivia
Entre otros temas el Presidente Daniel se refirió a Bolivia, destacando que “tenemos una batalla allá en Bolivia, no quieren reconocer los resultados de las elecciones. Ya hay actos de violencia, prácticas terroristas parecidas a las que pusieron en práctica aquí, muy parecidas, las prácticas terroristas. Y levantando la misma bandera: ‘que se vaya Evo’, un compañero que llegó a la presidencia a través de los votos y que logró recuperar recursos naturales a favor del Estado, para desarrollar programas en beneficio del pueblo, de los campesinos, de los trabajadores, de los indios que estaban totalmente marginados y que le dio a Bolivia un crecimiento. Fíjense, que parecido al fenómeno en Nicaragua en cuanto al crecimiento el de Bolivia durante todos estos años, con la diferencia de que nosotros venimos creciendo ‘con las uñas’ y lógicamente, que dentro del marco del ALBA una gran solidaridad, pero Bolivia tiene recursos naturales, tiene gas, y ese gas que lo nacionalizó Evo, le dio lógicamente a Bolivia, al Estado boliviano, al Gobierno, un recurso para poder desarrollar programas de salud, de educación, vivienda, cuánto programa ha desarrollado allá en beneficio, y un crecimiento, el más alto del Sur, y un poco más alto que el nuestro, 6 por ciento de crecimiento traía Bolivia”, explicó.
Dijo que con esto que está sucediendo están apuntando a destruir la economía boliviana, igual que lo que intentaron aquí: destruir la economía, “y después que tratan de destruir la economía, salen quejándose”.
“Y este es un mundo que está sacudido por la inestabilidad. Vemos países donde se presentan explosiones sociales, países donde nos decían que eran el diamante de la economía latinoamericana y caribeña, gracias a Pinochet. El diamante, así le llamaban, y los economistas haciéndose ver con las grandes ciencias, haciéndose eco… ‘Sí la economía chilena, un milagro’. Ahí está el milagro. Sí, mucha riqueza, pero ¿a quién le quedaba esa riqueza?, ¿a quién le quedaba esa riqueza? Como sucede en los mismos Estados Unidos: ¿a quién le queda esa riqueza? Porque en los mismos Estados Unidos hay pobreza, hay hambre, hay miseria, hay asesinato de niños, de mujeres en las escuelas, no hay seguridad. En los Estados Unidos no hay seguridad, esa es la verdad”, afirmó.
El comandante Daniel Ortega añadió que Estados Unidos, habla ya de meter tropas a México por los problemas que se presentan, donde hay muertos, resaltó que eso es producto de las armas que llegan de Estados Unidos.
"Con esas armas de guerra se cometen crímenes en México y en algunos países de nuestra región, ya no digamos los crímenes que se cometen casi a diario en los Estados Unidos con esas mismas armas que se distribuyen. Barbarie en los Estados Unidos, asesinatos de niños en las escuelas, ah ¿y eso es seguridad? Y el pueblo norteamericano se molesta y reclama cuando se producen estos crímenes, asesinatos en las sinagogas, asesinatos de mexicanos, asesinatos de afrodescendientes, o sea, una criminalidad en los Estados Unidos donde andan con esas armas de guerra que se venden en el mercado norteamericano por la libre”.
“En todo caso, habría que hacer un esfuerzo común ¿para qué?, para que Estados Unidos corte esa venta de armas, restrinja esa venta de armas y ya se verán los resultados en los mismos Estados Unidos y también verán los resultados en otros países, sobre todo mesoamericanos, de donde vienen el flujo de armas de los Estados Unidos para que luego se cometan crímenes en contra de las familias”, aseguró.
