En la Iglesia La Merced del barrio Miguel Larreynaga, el padre Antonio Castro celebró una eucaristía en conmemoración del sexto aniversario del tránsito a la inmortalidad del Comandante Eterno Hugo Chávez Frías, en la que se subrayó que el líder bolivariano fue un hombre que entregó solidaridad a todos los pueblos del mundo y particularmente a los de América Latina y el Caribe.
En esta ceremonia religiosa participó el embajador de la República Bolivariana de Venezuela, Javier Arrúe, personal de la sede diplomática, militantes del Frente Sandinista, miembros del comité de solidaridad con la revolución bolivariana.
El padre Castro habló que Venezuela no requiere de “ayudas humanitarias” que está disfrazada para intentar dominar y someter a un pueblo.
“La mejor respuesta que se debe dar a esa entre comillas, ayuda humanitaria, ¿cuál es?, ¿cuál sería?, no es llenar camiones de víveres, sino que, la mejor respuesta debería ser lo que han impuesto el bloqueo económico, que significa hambre, significa parar la producción, detener exportaciones, significa someter a un pueblo a la extrema pobreza, eso es violación a los derechos humanos, eso es violación a la soberanía, es violación a la dignidad de todo un pueblo”, agregó.
El sacerdote cuestionó de qué ayuda humanitaria hablan, “están engañando totalmente a un pueblo, manipulando e utilizando para fines propios de dominación, de invasión y de sometimiento, si es realmente ayuda humanitaria, que no es ayuda, es un derecho, levantar todo tipo de bloqueo contra Venezuela, contra Cuba, contra sanciones que se han dado aquí en nuestra Nicaragua, creo debería de pensarlo seriamente estos países poderosos que están viendo viga de nuestros países y no ven sus propias vigas, la gran viga que tienen en sus propias regiones”, dijo Castro.
Habló también que Chávez fue un hombre de mucha fe cristiana, valor que, desde muy jovencito cultivo como monaguillo en su natal Barinas, fue un hombre lleno de amor y cariño.
“Es importante toda esa dimensión de fe, esa dimensión cristiana y no tanto que estuviera todo el tiempo en la iglesia, tocándose el pecho y rezando, sino que lo hizo a través de acciones concretas de beneficio de su propio pueblo y es más de los pueblos de América Latina, cuantas veces a Nicaragua le tendió la mano fraterna y solidaria. Recuerden cuando no teníamos luz durante 8, 10 o 12 horas, quien resolvió y ayudó a encontrarle solución a esa problemática, fue el presidente Chávez enviando las plantas generadoras para levantar la electricidad y en consecuencia la producción y el desarrollo de nuestro país, cuántos hermanos no videntes fueron operados por Misión Milagro, cuántos fueron también alfabetizados, cuántos proyectos de viviendas, el proyecto Simón Bolívar”, destacó Castro al hablar del comandante Hugo Chávez.
“El comandante Chávez está en cada uno de nosotros, yo creo que es un verdadero privilegio y una verdadera satisfacción compartir con el pueblo nicaragüense el tránsito a la eternidad de ese hombre que se quedó clavado en el alma de todos nosotros. Hoy nos toca a nosotros, no podemos seguir esperando a que Chávez resolviera los problemas, nos enseñó a caminar con valentía, con soberanía, con un afán infinito de justicia por los eternamente excluidos y nos toca a cada uno de nosotros defender la paz, la soberanía, ese es el legado verdadero de Chávez”, dijo Arrúe.
Theo Klomberg, el cura holandés enamorado de la Revolución Sandinista
También en la misa, se recordó al sacerdote de origen holandés Theo Klomberg que por más de 30 años vivió en el país, entregando amor, consuelo y la palabra de Dios, al pueblo y principalmente a las madres de los héroes y mártires de San José de las Mulas.
Al finalizar la misa, el padre Antonio Castro resaltó la celebración de las elecciones regionales de la Costa Caribe, en la que espera se continúen desarrollando en paz, en armonía y tranquilidad, tal y como ha ocurrido en las primeras horas de la mañana. Igual se refirió sobre el inicio de las negociaciones para encontrar puntos de entendimientos que fortalezcan la paz en el país.