"Los intentos de imponer a Kiev una elección artificial entre Rusia y Europa fue lo que impulsó la sociedad ucraniana a la división y a una dolorosa confrontación interna ", ha dicho este viernes el presidente ruso, Vladímir Putin.
Ha acentuado que la víctima de la situación es sobre todo la población civil. "En el sudeste del país vemos un derramamiento de sangre, tiene lugar una catástrofe humanitaria real, decenas de miles de refugiados se ven obligados a buscar asilo en Rusia, se persigue a los periodistas, que mueren intentando cumplir con su deber profesional; violando todas las regulaciones y convenciones se ataca a diplomáticos, como pasó en la embajada de Rusia en Kiev y el consulado en Odesa", puntualizó el presidente.
Hablando en el marco de la solemne ceremonia de entrega de cartas credenciales de embajadores extranjeros en el Kremlin, el mandatario ruso insistió en la necesidad de poner fin al derramamiento de sangre en el sudeste de Ucrania. Acentuó que un paso clave para que todas las partes del conflicto ucraniano puedan llegar a un compromiso es garantizar un cese duradero del fuego: la tregua actual está programada para que termine dentro de unas 10 horas.
Ucrania ha firmado este 27 de junio la parte económica del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea en una cumbre en Bruselas. El documento todavía debe ser ratificado por la propia Ucrania y todos los Estados miembros de la Unión: el proceso de ratificación en la UE puede tardar varios años en completarse.
Un elemento clave del acuerdo es la creación de una zona de libre comercio entre la UE y Ucrania. En realidad se trata de la supresión gradual de los aranceles y cuotas aduaneras. El país también tendrá que tratar de conseguir que su economía aplique las normas europeas de calidad para garantizar la competitividad de sus productos.