La militancia joven organizada en la Juventud Sandinista celebró junto a la compañera Blanca Segovia Sandino Aráuz el 86 aniversario de su natalicio con un emotivo homenaje en el cual el Coro Infantil Rubén Darío entonó las mañanitas y otras piezas musicales como La Flor de Pino. Además se hizo entrega de un cuadro con la imagen del general Sandino.
Desde la casa de habitación de Blanquita, los jóvenes reconocen en ella la valentía de la mujer revolucionaria la cual fue heredada por su padre el general Augusto C. Sandino, quien marcó la historia de lucha del pueblo nicaragüense.
“Hemos acompañado la celebración del cumpleaños 86 de la hija de nuestro general Sandino, hemos abrazado la sangre de nuestro general de hombres y mujeres libres y al venir a la casa de Blanca Segovia y abrazarla es el símbolo del compromiso firme de hacer realidad los principios de patriotismo y nacionalismo que se mantienen vivos en la defensa de la paz de nuestro pueblo”, expresó Milton Ruiz, coordinador nacional de Juventud sandinista.
Ruiz se refirió a su vez al homenaje que hoy se le rinde a la Heroína Nacional Blanca Aráuz quien paso a otro plano de vida en una fecha como hoy.
“Reconocemos la lucha y trascendencia de los valores de Blanca Aráuz, los que nos acompañan en cada paso que damos para fortalecer la capacidad que tenemos cada uno de los nicaragüenses”, dijo.
El homenaje contó con la presencia de los hijos y nietos de Blanca Segovia, quienes agradecen el reconocimiento que le brinda el pueblo nicaragüense y la militancia sandinista a la hija de uno de los más insignes nicaragüenses.
“Hoy celebramos el nacimiento de nuestra abuelita, a ella siempre le gusta sentir el cariño del pueblo, también hoy recordamos a nuestra bisabuela Blanca Estela Aráuz, para nosotros es un orgullo ser parte de esta descendencia porque nos han enseñado que tenemos que ser consecuentes, defendiendo nuestros derechos y a ser los mejores en las tareas que se nos asignen, siempre destacar”, subrayó Blanca Segovia Castillo.