La vicepresidenta compañera Rosario Murillo, ratificó que el Gobierno de Nicaragua, a través de su delegación, está cumpliendo con la hoja de ruta que fue firmada el pasado 5 de marzo en la Mesa de Negociación por el Entendimiento Nacional y la Paz.
“Esta mañana la delegación de nuestro gobierno ante la Mesa de Negociación por el Entendimiento Nacional y la Paz, estuvo en el local de las conversaciones ratificando el invariable compromiso del Estado nicaragüense con esa mesa de conversaciones, con la hoja de ruta que se firmó el 5 de marzo y con el propósito que nos reúne a todos de seguir construyendo agendas para la reconciliación, para la paz, para el entendimiento, para la fraternidad, para avivar ese espíritu de familia nicaragüense, ese espíritu que a todos nos hace responsables de construir, edificar entendimiento, reconciliación todos los días desde la familia, desde la comunidad y desde los espacios que se han venido estableciendo para las pláticas, para los encuentros y para poder avanzar hacia la recuperación, el avivamiento, la restauración de todo lo bueno que somos los nicaragüenses, las nicaragüenses”, manifestó la compañera Rosario Murillo.
“Así que hemos llegado esta mañana, hemos estado ahí, hemos esperado y confiamos en Dios en que lo mejor de nosotros mismos surja en las próximas horas de manera que nos encontremos nuevamente como ha sido establecido por nosotros mismos, según lo acordado en la hoja de ruta del 5 de Marzo”, añadió la vicepresidenta.
La compañera Rosario Murillo ratificó a las familias y al pueblo nicaragüense “la inalterable voluntad, inclaudicable compromiso de trabajar juntos por la estabilidad, la tranquilidad, la seguridad y la paz, todo lo que es absolutamente indispensable para el bienestar de las familias y de los hogares nicaragüenses”.
Como pueblo de Dios, vamos adelante
La vicemandataria también dio lectura al Salmo 138 “Acción de gracias por el favor de Jehová” y reflexionó que Nicaragua como pueblo de fe y pueblo de Dios “vamos adelante, implorando, invocando, rezando, haciendo, disponiendo lo mejor de nosotros mismos: buena voluntad y buen corazón, buena fe para continuar trabajando juntos en el avivamiento de todo lo bueno que somos y la fraternidad que está en nosotros”.
Agregó que Dios está con el pueblo nicaragüense “nos levanta, nos calma, responde a nuestras súplicas cuando de alguna manera sentimos que tenemos que reencontrar el camino y nos dispone a reencontrar el camino”.
“Así estamos en nuestra Nicaragua reencontrando todos los días, con absoluta confianza y fe en Dios nuestro Señor, el camino del bien común, el camino del entendimiento, el camino del reencuentro desde la fe, la esperanza y la confianza que tenemos absoluta, plena, que Dios está con Nicaragua y que si Dios con nosotros, ¿quién contra nosotros?”, indicó.