El concesionario del Gran Canal Interoceánico, Wang Jing, aseguró que el proyecto será ajustado, mostrándose seguro y convencido que arrancará a finales del 2014 y estará listo en el 2019, de acuerdo a lo previsto.
Wang habló con el diario chino “Global Times”, a quienes dijo que “ahora se está pendiente de estudios de los impactos ambientales y sociales, lo que llevará a algunos cambios, pero el panorama está configurado y el canal se completará en 2019”.
Insistió en que se está avanzando según lo planeado, absolutamente convencido que cambiará el panorama del comercio marítimo mundial.
“El proyecto es el mayor proyecto de infraestructura en la historia del hombre en términos de dificultad de ingeniería, escala de inversión, carga de trabajo y su impacto global", dijo Wang.
“Nuestro canal es de 15 metros de espesor de acero, duro. Imagínese su tamaño. (Será) el más grande del mundo", enfatizó, agregando que el Canal de Nicaragua será capaz de acoger a los buques con un desplazamiento de 400.000 toneladas.
Wang reveló que los principales constructores navales del mundo ya han iniciado proyectos de investigación para diseñar y construir buques especialmente para el Canal de Nicaragua.
Sobre las críticas de que habrá mucho problemas por resolver y sobre todo complejos, respondió que “estoy de acuerdo con todas las dificultades, pero para mí, estos problemas son temporales”, porque “como inversionista, yo preferiría ver las oportunidades de mañana”.
“Porque si no lo hace, usted estará en un segundo puesto, nunca serás el campeón”, dijo mostrándose optimista.
El concesionario se siente seguro de tener los 50 mil millones de dólares para la mega obra.
“Si usted puede ofrecer, usted encontrará todo el dinero del mundo a su disposición", dijo Wang, quien agregó que va a conseguir el dinero a través de medidas combinadas de participaciones cruzadas, préstamos bancarios y la emisión de bonos de deuda.
Estima que su compañía podría recaudar miles de millones de dólares por el valor de los peajes, pero instó a los inversores a no perder de vista el panorama general.
Wang negó que las relaciones con el gobierno de Nicaragua estén basadas en influencias personales o políticas.
“Nuestra amistad personal no tiene ninguna influencia en las decisiones de las empresas en relación con el proyecto del canal”, destacó.
Ver más allá del bosque
"El canal traería enormes beneficios para el comercio marítimo mundial. Esto hará posible a gran escala, de bajo costo, el comercio de alta eficiencia, el desbloqueo de la demanda del comercio entre Oriente y Occidente", dijo Wang.
“El continuo crecimiento de la economía china y un aumento de Latinoamérica sustentan un volumen del transporte marítimo mundial cada vez mayor", dijo al Global Times por su parte Zhang Yongfeng, un experto naviero con sede en Shanghai.
Los socios que todos quieren conocer
Uno de los cuestionamientos de los detractores del Canal Interoceánico es que Wang Jing era un fantasma, que no tenía capacidad, que todo era propaganda y después, se han concentrado en exigir los nombres de los socios o financistas del proyecto.
De eso habló Jing con el Global Times, asegurando que entre sus socios están China Gezhouba Group Corporation (CGGC), un gigante de la infraestructura en proyecto de agua, Xugong Group Construction Machinery Co, un peso pesado de la fabricación de la construcción, y China Railway Construction Corporation.
Sumó a empresas extranjeras, tales como McKinsey & Company y Gestión de Recursos Ambientales.
“Usted puede contar con una docena de anuncios similares (como el de CGGC) que van a seguir", dijo Wang.
Precisó que sus socios van desde empresas de propiedad estatal administradas por el Gobierno central de China Continental, a empresas extranjeras, y de las instituciones financieras a los fabricantes de equipos de diseño y los proveedores de servicios de construcción.
Es una cadena
"El proyecto del canal es una cadena industrial. En cada eslabón de esta cadena, habrá un líder de la industria que participa en este proyecto", dijo Wang, y señaló que el peso de su participación se decidirá de acuerdo con la "regla del mercado”.
Wang rechazó los rumores de que el canal que está construyendo se convertiría en un competidor para el Canal de Panamá.
"El Canal de Panamá no se ajusta a barcos de mis clientes. Después de la expansión, sólo pueden dar cabida a barcos de hasta 150.000 toneladas. Pero nuestro Canal ofrece una ruta alternativa para los que navegan a través del Canal de Panamá", dijo.
Construiremos, no dañaremos
Wang Jing envió un mensaje a los nicaragüenses preocupados por el medio ambiente y el cuido del Lago Cocibolca.
"Tenemos los derechos de concesión de 100 años, vamos a ser responsables con nosotros mismos, y estamos allí para construir, no destruir", dijo Wang.
Aseguró que los gastos del proyecto van de 7 a 20 millones de dólares por mes. "A medida que el proyecto avanza, habrá más noticias", sostuvo.
Acerca de los cuestionamientos de que el tráfico de mercancías transatlánticas están en declive, respondió: “Esa forma de hablar es una tontería. La demanda de tráfico trasatlántico sólo aumentará, a partir de una visión de largo plazo”.
Resaltó que incluso este canal nicaragüense beneficiaría el comercio de Estados Unidos en todo el mundo.