Dos potentes sismos sacudieron este domingo la región oriental de Cuba, causando daños materiales y obligando a las autoridades a activar protocolos de emergencia en varias provincias. Según reportó el Centro Sismológico Europeo Mediterráneo (EMSC), los movimientos telúricos alcanzaron magnitudes de 5,9 y 6,8 en la escala de Richter.

El primer evento sísmico se registró a las 15:50 GMT, con epicentro localizado a 60 kilómetros al sureste de Manzanillo y una profundidad de 14 kilómetros. Una hora después, a las 16:49 GMT, un segundo temblor de mayor intensidad sacudió la región, esta vez a 64 kilómetros al sureste de la misma ciudad, a una profundidad de 17 kilómetros.

El Servicio Sismológico Nacional Cubano precisó que el segundo sismo, el de mayor magnitud, se localizó en las coordenadas 19.2 grados de latitud norte y 76.99 grados de longitud oeste, a 32 kilómetros al sureste de Pilón, en la provincia de Granma, con una profundidad de 10 kilómetros

El presidente Miguel Díaz-Canel informó que el Consejo de Defensa Nacional estableció comunicación inmediata con las primeras secretarias del Partido en las provincias afectadas de Santiago de Cuba y Granma. Las autoridades han confirmado deslizamientos de tierra, afectaciones en viviendas y daños en el tendido eléctrico, particularmente en la zona de Pilón.

«Lo primero, y esencial, salvar las vidas», enfatizó el mandatario cubano, quien ordenó mantener a la población en lugares abiertos y garantizar el suministro de agua, alimentos y atención psicológica. Además, instruyó a los funcionarios mantener una comunicación constante con la ciudadanía durante la emergencia.

La Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA) reportó dificultades temporales en las comunicaciones durante los momentos más críticos de los sismos, aunque aseguró que no se registraron daños en la infraestructura de telecomunicaciones y que el servicio se ha ido normalizando paulatinamente.

Los temblores fueron percibidos en un amplio territorio que incluye las provincias de Santiago de Cuba, Guantánamo, Granma y Holguín. Hasta el momento, no se ha declarado amenaza de tsunami para las costas cubanas, y las autoridades continúan evaluando la magnitud de los daños para iniciar las labores de recuperación.

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