Edificios en ruinas, déficit presupuestario y violación a los convenios laborales, así fue encontrada la Empresa Portuaria Nacional (EPN) en el año 2007 por la administración del gobierno sandinista a cargo del presidente Daniel Ortega, quien de forma inmediata se dispuso con su equipo de trabajo a reactivar la actividad portuaria nacional, logrando a la fecha expandirla hacia otros países.
El compañero Virgilio Silva, presidente ejecutivo de la EPN, destacó que gracias a la segunda etapa de la Revolución Sandinista encabezada por el presidente Daniel Ortega, actualmente la Empresa Portuaria se encamina hacia la vanguardia regional.
“Por primera vez en la historia y solo con el presidente Daniel Ortega se están haciendo inversiones para mega proyectos, sobre todo en la industria e infraestructura portuaria, uno de ellos es en el Puerto de Corinto, con 163 millones de dólares de inversión, además de construirá una terminal de cruceros, un proyecto logístico y edificación para la dirección administrativa”, señaló.
Otro de los grandes proyectos que son posibles gracias al proceso revolucionario en su segunda etapa es la construcción de un puerto en el Caribe Sur, obra que alcanzará los 320 millones de dólares.
“Vamos a ser mucho más eficientes con los nuevos puertos porque ya no vamos a depender de Puerto Cortes y Puerto Limón, donde generalmente se nos van 126 mil contenedores por año, lo cual una vez construidos nuestros puertos se nos generarán más fuentes de ingreso y los exportadores obtendrán mejores costos de exportación”, manifestó.
Más desarrollo y beneficios laborales
El esfuerzo de once años de trabajo ha traído consigo mucho desarrollo entre ellos la recuperación de espacios y el cumplimiento de los derechos de los trabajadores mandatados por la ley.
“La Empresa Portuaria fue encontraba en banca rota, solamente había dos líneas navieras y hoy contamos con trece y con nuestra línea naviera ‘Nicaragua Shipping’, sumamos 14 en total. En 2007 nada más existían dos equipos portuarios los que eran rentados a Guatemala, además, Puerto Cabezas había sido vendido a un coreano y nos tocó seis meses recuperarlo, Puerto el Bluff se encontraba embargado y nos tocó pagar esa deuda para recuperarlo”, dijo.
“Hoy nuestros compañeros trabajadores gozan de sus derechos restituidos con un convenio de 82 millones de córdobas, superando los cinco millones de córdobas que les destinaban los anteriores gobiernos”, subrayó.