En la Iglesia Nuestra Señora de la Merced en el barrio Miguel Larreynaga, se realizó una misa en homenaje al segundo aniversario del tránsito a la inmortalidad del Jefe de la Revolución Cubana, Comandante Fidel Castro Ruz.
La liturgia es celebrada por el padre Antonio Castro y participan el embajador de Cuba, Juan Carlos Hernández Padrón; el embajador de Venezuela Javier Arrué; el coordinador de la Juventud Sandinista 19 de Julio, miembros del Comité de Solidaridad con Cuba y familias del barrio Larreynaga.
El padre Castro indicó que en este segundo aniversario del paso a la inmortalidad del comandante Fidel, en Nicaragua ve signos de vida, enumerando una serie de programas impulsados por la Revolución Cubana, como la Misión Milagro y Yo Sí Puedo, entre otros, que muestran la mano solidaria del pueblo cubano en nuestro país.
En su homilía el padre Castro habló de las enseñanzas de Jesús, que dio el ejemplo de lo que debe ser un verdadero rey.
“Él es rey en el sentido que tiene su poder sobre todo lo creado, por Él que es la palabra del Padre, fue hecho todo cuanto existe, sin Él, dice Juan, nada se habría hecho. Tiene pues poder sobre todo lo creado, sobre la historia humana, no es un rey como pensaban y esperaban los coterráneos de Él. Pensaban que Él iba a ser el que iba a restaurar la soberanía de Israel, otros pensaban que su reino era de poder, de dominio y Él le dice a los discípulos: ‘el que quiera ser primero, el que quiera ser rey, el que quiera ser autoridad, tiene que ser el último, el servidor de los demás, eso es ser rey, ser servidor de los demás’ y Él lo dice, ‘yo no he venido para ser servido’, porque muchos reyes buscan como ser servidor, dominar, oprimir, explotar a su pueblo y Jesús dijo No, el que quiera ser rey debe ser el servidor”, reflexionó el padre Castro sobre las enseñanzas dadas por Jesucristo.
Al recordar el aniversario del paso a otro plano de vida del Comandante Fidel, señaló que mientras estuvo en la vida terrenal, fue un hombre que predicó con el ejemplo de servicio al pueblo cubano y a los pueblos latinoamericanos, que son cubiertos por esos programas solidarios.
Un líder que desbordó solidaridad
“Yo veo para nuestros países en Nicaragua y el mundo, al celebrar los dos años de nuestro hermano Fidel, signos de vida. Pienso para nuestra Nicaragua la Misión Milagro, ¡cuántos ciegos que no podían ver!, la Misión Milagro acá en Nicaragua ¡cuántos miles de hermanos recuperaron la vista para poder ver, contemplar la naturaleza, la realidad, a través de esta operación Milagro!, sin ningún interés, incondicionalmente sirviendo, dando vida a aquellos que no tienen vida, que no podían pagar una operación de cinco o diez mil dólares y la han recibido acá”, afirmó.
Agregó que “otro signo de vida para los discapacitados, tantas personas discapacitadas, los programas Todos con Vos, todas las fuerzas, toda la energía, todo el amor contigo para que puedas levantarte y caminar, y salir adelante. Y cuántos hermanos que hoy son profesionales de la salud, miles de hermanos nuestros en Nicaragua y en muchos otros países, profesionales de la salud, médicos, especialistas en todas las ramas de la salud, hermanos nuestros que hoy no serían lo que son sino hubiera sido por esa mano fraterna, solidaria de amor para formarlos”.
Pidió a todos aquellos que se formaron en Cuba gracias a esa solidaridad, que sigan el ejemplo de Fidel, de ser solidarios y agradecidos, sirviendo a los pobres y necesitados.
El embajador de Cuba, agradeció al padre Castro por oficiar la misa y honrar el legado del Comandante Fidel, que sembró la semilla de la solidaridad y de la dignidad del pueblo cubano en todo el mundo.
“Escuché muy atento desde el inicio las palabras del padre y lógicamente era una descripción exacta de lo que siempre fue nuestro comandante invencible Fidel Castro Ruz, esa persona sencilla, modesta que se dedicó a servirle fielmente y que aún después de muerto nos dio lecciones de dignidad, de grandeza, que no midió ni siquiera que lo subieran a un pedestal, ni que le hicieran un tributo poniéndole un nombre a una plaza o una calle en nuestro país, sino que lo recordaran como lo que fue, por su obra y por esa vocación de servicio, constante y permanente que nos devolvió no solo a los cubanos, sino también a otros pueblos de América Latina; la dignidad, la entrega, la dedicación y la vocación por devolver la luz de la verdad a tantos analfabetas, no solo en nuestro país sino en otras tierras como Nicaragua”, declaró Hernández Padrón.
Pidió al pueblo nicaragüense recordar al Comandante Fidel no con llantos, “sino con la alegría de los niños, la alegría del canto, de la vida, que fue lo que siempre nos enseñó”
El embajador de Venezuela, José Arrué, recordó un anécdota vivida por los comandantes Fidel y Hugo Chávez, donde el primero le dijo “yo soy ateo, soy no-cristiano, pero creo en tu Dios y soy cristiano como eres tú, ese es un buen testimonio de lo que es el verdadero cristianismo”.
Fidel nace y renace todos los días
El coordinador de la JS19 de Julio, Milton Ruiz, manifestó que están conmemorando la vida y legado del comandante Fidel con una serie de actividades y estas llevan el mensaje de que el líder cubano no ha muerto, está más vivo que nunca.
“Decimos vida y obra porque Fidel nace y renace todos los días en el corazón de la juventud cubana, en el corazón de la juventud latinoamericana nicaragüense, en cada acción solidaria. Estamos oficiando una misa porque Fidel era de los humildes, de los sencillos y con esa leyenda invicta Fidel nos llama a la reconciliación y a la paz”, dijo Ruiz.
Como parte de esta jornada de homenaje, se realiza un maratón, luego una proyección documental de la vida y obra de Fidel en diferentes facetas y concluye con un concierto en el Puerto Salvador Allende.
En la misa estuvieron presente la familia del compañero Bismarck Martínez, secuestrado por grupos golpistas en el municipio de Jinotepe, desapareció que se ha mantenido desde hace seis meses.
