El presidente de la Organización Deportiva Centroamericana (ORDECA), Emmett Lang, destacó este domingo durante el acto central de la inauguración de los XI Juegos Centroamericanos, que el hecho de que este evento deportivo se esté desarrollando en tierras pinoleras es porque el Comandante Daniel Ortega había asumido ese compromiso desde que estuvo al frente del gobierno revolucionario.
Lang recordó que hace 27 años Nicaragua hizo la primera solicitud para realizar estos juegos.
Afirmó que se hicieron todos los esfuezos posibles y que incluso con ayuda de países amigos se mandó a más de 800 atletas a entrenarse fuera de Nicaragua a lo largo de casi dos años.
“Por primera vez Nicaragua tenía el tercer lugar de Centroamérica (en este tipo de competencias) y obteníamos 59 medallas de oro, fue un momento en que nos atrevimos (a solicitar la sede) porque pensábamos hacer la infraestructura que es la que al fin y al cabo se realizó”, explicó.
Dijo que en aquel momento el Comandante Daniel Ortega era el Presidente de Nicaragua, y él el presidente del Comité Olimpico.
“Estábamos dispuestos a meternos a la aventura de los juegos centroamericanos, no pensando en esta maravilla que tenemos ahora”, explicó.
Juegos de la unidad
En este sentido, refirió que tanto Daniel como Rosario han asumido el compromiso de realizar estos juegos.
“Desde aquellos años estábamos pensando de la importancia que tienen los jóvenes y como revolucionarios así lo veíamos, así lo entendíamos y así lo queremos ver”, añadió.
“Por circunstancias políticas se dejaron de hacer los juegos, pero nos tocó nuevamente estar juntos y le digo: Presidente, me siento emocionado, me siento realizado porque para los jóvenes de Nicaragua, para los jóvenes centroamericanos, para Centroamérica, para la Patria Grande de nosotros, estos juegos, además de todo lo que va a dejar a la juventud de Nicaragua, da unidad en Centroamérica”, enfatizó.
“Unidad es lo que necesitamos los países centroamericanos, no solamente queremos unidad en lo económico, queremos unidad total de los pueblos centroamericanos y así lo pensó Sandino y así lo pensamos nosotros”, agregó.
Emmet saludó a los dirigentes de los organismos olímpicos, así como a sus homólogos centroamericanos que están en Nicaragua siendo testigos de este gestó de unidad.
Reconocimiento a héroes del deporte
El también presidente del Comité Olímpico Nicaragüense recordó a todos los héroes del deporte que han apoyado al país, entre estos Carlos García quien fue un dirigente fundamental del béisbol.
Igualmente hizo un reconocimiento a Reynaldo González López quien se metió de cabeza al plan olímpico de los noventa “no sólo como Ministro de Deportes de Cuba”, sino personalmente muriendo en México como “un colaborador deportivo centroamericano”.
Lang Salmerón extendió ese homenaje a Manolo González Guerra, presidente del Comité Olímpico de Cuba “quien fue prácticamente el que nos guió para poder formar nuestro Comité Olímpico Nicaragüense”.
El dirigente olímpico destacó así mismo a la gran gloria deportiva Roberto Clemente, quien un 31 de diciembre de 1972 falleció en un accidente aéreo cuando traía ayuda a los damnificados del terremoto de Managua.
En este sentido, también agradeció a Osvaldo Gil, un entrañable amigo de Clemente y de Nicaragua.
“Creo que en el corazón de los nicaragüenses Clemente tiene que estar presente”, apuntó.