Los franceses están llamados este domingo a las urnas para elegir el sucesor de François Hollande en el Elíseo en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. Los colegios electorales han abierto este domingo a las 8 de la mañana, sin mayores incidencias.
A las 17.00 horas, la participación es del 65,3%, más de seis puntos por debajo de las elecciones de 2012, que fue del 71,96%, según datos del ministerio de Interior francés.
A las 12 del mediodía, los datos de participación (28,23%) habían bajado algo más de dos puntos frente a 2012, que fue del 30,66 %. No obstante, la participación ha sido casi idéntica a la de la primera vuelta (28,54%) del pasado 23 de abril, de acuerdo con las mismas fuentes.
La expectación ha recaído en la aparición de los candidatos en sus colegios electorales. Por una parte está Emmanuel Macron, que obtuvo el 24,01% de los votos; y por otra la candidata Marine Le Pen, que consiguió el 21,3% de los votos
Por su parte, el conservador François Fillon consiguió el 20,01% de los votos y el izquierdista Jean-Luc Mélenchon, el 19,58%. Benoît Hamon, candidato del gobernante Partido Socialista, se quedó en el 6,36% del total de votos.
Emmanuel Macron, favorito en todas las encuestas, ha sido el primero de los candidatos a la presidencia en votar. Lo ha hecho acompañado de su esposa Brigitte a las once de la mañana en Touquet. Un baño de masas le ha esperado antes de depositar su voto.
Durante la campaña electoral, el candidato centrista ha mantenido una confortable ventaja en los sondeos sobre su rival, Marine Le Pen.
Marine Le Pen ha votado solo unos minutos más tarde en su bastión electoral, Hénin-Beaumont. La candidata ha depositado su voto a las 11.05 de la mañana. La candidata ha llegado acompañada, como hizo hace dos semanas, del alcalde de Hénin-Beaumont, Steeve Briois, que la sustituye “interinamente” como presidente del Frente Nacional.
A diferencia de la primera vuelta, la candidata no se quedará hoy en Hénin-Beaumont, pues vuelve a París para esperar los resultados electorales, concretamente en una casona al lado del bosque de Vincennes. El Frente Nacional ha anunciado que a partir de las 22 horas la velada será “a puertas cerradas”.
Otro indicativo que hace pensar que el Frente Nacional no tiene hoy ganas de fiesta es la rápida salida de Le Pen del colegio electoral donde ha depositado su voto, pues apenas ha permanecido cinco minutos en el centro. Con una sonrisa tensa, ha votado y se ha marchado rodeada de más periodistas que de simpatizantes.
Sin embargo no ha sido ninguno de ellos el primer político en votar en esta jornada electoral. El más madrugador ha sido el actual presidente François Hollande, que ha ejercido su derecho a voto a las diez en el colegio electoral de Tulle, su feudo en el centro del país.
En los últimos días de campaña, el socialista ha insistido en la necesidad de votar a Macron para frenar el ascenso de Le Pen.
El siguiente en acercarse a las urnas ha sido Benoît Hamon. El candidato socialista en la primera vuelta ha ejercido su derecho a voto en la localidad francesa de Trappes a las 10:30 horas. El ex ministro francés de Educación se presentó en su día como estandarte de una izquierda idealista y joven opuesta a la renovación liberal de su rival, Manuel Valls.
Hamon propuso en su campaña derogar la reforma laboral. No obstante, su propuesta estrella era la de la renta básica universal para todos los franceses mayores de edad.
Jean-Luc Mélenchon ha sido el último en votar. El candidato en la primera vuelta por la izquierda alternativa ha llegado a su centro de voto en París cerca de las doce del mediodía.
Mélenchon ha ha sido muy criticado por haberse negado a dar una consigna de voto clara a favor de Macron en esta segunda vuelta. No obstante, el de izquierdas ha asegurado en todo momento que “en ningún caso lo haría por el Frente Nacional”.
Otros líderes han depositado ya su voto. Es el caso de Bernard Cazeneuve, primer ministro francés, que ha votado en Cherbourg. También ha ejercido su derecho a voto Nicolas Sarkozy, en este caso en París.