Productores nicaragüenses participaron en un taller realizado por el Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria (INTA) con apoyo de la Misión Taiwán en Nicaragua.
Este proyecto consiste en desarrollar la producción de plantas in vitro con parcelas de plantas élites.
Luz María Flores, INTA, de coordinación del proyecto de plátano en Nicaragua con Misión Taiwán, dijo que se trata de sacar plantas hijas, que en el laboratorio van a servir para la multiplicación de las mejores plantas.
“Estas plantas que están aquí son las plantas que se seleccionaron a nivel de campo, que son altamente productoras, tienen alto rendimiento”, explicó Flores.
“La ventaja de trabajar con este tipo de técnicas es que el productor va a obtener una plantación uniforme. Todas las plantas van a ser altamente productivas y garantizando que son sanas”, añadió.
Con este apoyo los productores obtendrán los mejores rendimientos.
Se trata de darle valor agregado al producto en cuanto a los nutrientes se refiere, el rendimiento de la producción y lograr nuevos usos, como la elaboración de vinagre de plátano.
Karlen Meza Mendoza, una de las participantes, destacó el carácter popular del cultivo del plátano y la importancia de darle valor agregado.
“Cuando aprendemos a procesarlo tenemos más opciones para poder proyectar este producto, obtener de él mejores recursos y que no se dañe en las fincas, cuando no se pueda comercializar”, dijo.