Con el grito jubiloso de “¿Quién causa tanta alegría? ¡La Concepción de María!”, la comunidad nicaragüense residente en Helsinki celebró con devoción la Purísima.
Los fieles devotos e invitados especiales se reunieron en la Embajada de Nicaragua para rendir tributo a la Inmaculada Concepción de María, reina de amor que cobija bajo su manto bondadoso a la patria de Sandino y de Darío.
El padre Marco Pasinato, párroco de la catedral de San Enrique, sede del obispado católico de Helsinki, bendijo la festividad. “María Santísima nos une en fe y hermandad”, dijo, y envió felicitaciones al pueblo nicaragüense que vive la Gritería con gran fervor mariano en todos los rincones de nuestra tierra.
Entre los participantes se encontraba el artista jinotegano Sergio Rodas, destacado restaurador de imágenes religiosas como la de Nuestra Señora de Lourdes, de casi dos metros de altura, ubicada en la catedral de San Enrique.
También en la ceremonia estuvieron presentes diplomáticos latinoamericanos residentes en Finlandia, como la embajadora de Venezuela, Zulay Prieto, y el embajador de Cuba, Eduardo Lazo, quienes luego de cantarle a la protectora y patrona de Nicaragua recibieron la tradicional “gorra” y degustaron bocadillos y bebidas típicas de nuestro país.
La comunidad nicaragüense en Helsinki veneró a la Santísima Virgen María, Madre de Dios, sumándose todas y todos en un solo abrazo de alianza y armonía cimentado por el glorioso orgullo de ser nicaragüense.