Los masayas, amantes de las letras que nacen de la inspiración del alma noble, despidieron a la poeta Ana Ilse Gómez, originaria de la comunidad Indígena de Monimbó, y quien falleció a sus setenta y dos años este primero de noviembre.
La poeta se destacó a nivel nacional e internacional. Previo su entierro en el Cementerio Central de esta ciudad, su cuerpo fue llevado a una misa de cuerpo presente que se ofició en la Parroquia San Sebastián de Monimbó, donde la poetisa corrió y nutrió su infancia para transformarlos en artes literarias.
Los restos mortales de la Poeta Ana Ilse Gómez, descansan en su tierra Masaya, donde siempre permaneció y recibió reconocimientos en vida de parte de la Alcaldía, que la nombró Hija Dilecta.