La primera acción de los habitantes del barrio 380 esta mañana fue sumarse a los esfuerzos para erradicar mosquitos adultos transmisores de enfermedades como el mortal dengue.
A pesar que algunos habitantes no colaboran con la fumigación, buena parte de los vecinos los instan a cooperar con la causa cuyo propósito es salvar vidas.
El Doctor César Castillo, director del Centro de Salud Roberto Herrera del Distrito I, explicó que la jornada de fumigación de este martes pretende liquidar al zancudo adulto.
“Tenemos sabido que hay otro tipo de actividades que van en conjunto con esto qué es la abatización intra-domiciliar, lo que son visitas, sensibilización (…) lo importante de eso es que con estas actividades la población tome conciencia, estamos en invierno y continúan las lluvias, se siguen presentando casos de dengue y recordemos que el dengue sí mata”, señaló.
Oralia Martínez, propietaria de una miscelánea, dijo que por la condición de su vivienda de albergar productos para el consumo no permite entrar a los brigadistas, pero aún así dijo estar consciente de la problemática que representan estás enfermedades.
“Aquí como es venta tomamos las medidas y como usted ve está limpio. Se tiene que mantener limpio siempre”, aseguró.
Sin embargo para su vecino de la calle siguiente, Roberto Arana, las medidas que se toman en el hogar son reforzadas con las medidas que toma el Ministerio de Salud.
“De nada sirve que fumiguen en una casa y en otra no porque el zancudo se queda allí. Yo le recomendaría a la población que permitan a las brigadas de fumigación entrar, para que podamos contrarrestar un poco la acción de la zancudo”, propuso.
La jornada de este martes llevaba la misión de fumigar unas 570 viviendas, para dar cobertura a más de 4 mil personas.
