La Coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, compañera Rosario Murillo, vía telefónica brindó un mensaje a las más de 400 protagonistas del Congreso Nacional de Consejería Familiar, que estuvieron presentes la mañana de este viernes en un hotel capitalino, siendo testimonio vivo del cambio que han visto en sus hogares gracias al trabajo incansable del Ministerio de la Familia por crear un ambiente de paz, amor y armonía.

Durante su mensaje, la compañera Rosario resaltó que la paz en la familia es el bien supremo, el legado y tesoro patrimonial que se deja a las nuevas generaciones.

“Ese es el modelo que tenemos en Nicaragua y cómo es de importante el trabajo de ustedes, compañeros, compañeras de las Consejerías de Familia; cómo es de valioso para extender esa cultura de comunicación, de convivencia respetuosa y armoniosa, de dignidad y de paz en nuestra Nicaragua”.

“Si no somos capaces en convivir en respeto desde el hogar, desde la familia, desde la comunidad, no seríamos capaces de asegurar estos Nuevos Tiempos de estabilidad y prosperidad, porque la base de la paz es la convivencia respetuosa, digna, armoniosa en el hogar, en la familia, en la comunidad. Ahí están las bases del cambio, ahí están las piedras fundacionales del cambio que tenemos que ir generando en cada uno de nosotros, y en nuestras familias, en nuestras comunidades, en todo el país”.

Promoción de valores: con amplitud de mente y aprendizaje continuo

Asimismo, resaltó lo complejo del trabajo de los consejeros en estos tiempos de distracciones y la pérdida de cierto grado de comunicación en la familia, debido a las nuevas tecnologías.

“Este es un mundo nuevo lleno de todo tipo de distracciones que no teníamos antes, las tecnologías (…) incluso hemos llegado a perder cierto grado de comunicación en la familia (…) estamos comunicándonos muchas veces más con personas fuera de la familia, a través de los teléfonos, a través de todas las herramientas de la tecnología”.

“Qué importante es el trabajo de ustedes que tiene que insertarse en la mentalidad de este nuevo mundo, donde es todavía más complejo trabajar cuando no sólo se trata de aprender a congeniar en la familia, a convivir armoniosamente (…) sino también con el mundo, porque estamos interconectados con el mundo”.

Rosario manifestó que es importante contribuir a mantener y afianzar los valores de Fe, Familia y Comunidad, “invadidos como estamos de otros valores, y no podemos obviar esa realidad; al contrario, tenemos que incorporarla creativa y positivamente”.

“Este mundo nos exige a todos amplitud de mente y aprendizaje continuo, agregó.

“Estoy segura que muchos de los problemas que ustedes conocen son problemas que se derivan de nuestra propia cultura o de nuestros propios, digamos, procesos culturales, porque no podemos decir que la violencia familiar sea un problema cultural, sino que son procesos culturales en los que tenemos que ir logrando cambios”.

“Estos son tiempos de energías victoriosas. Sentimos que hemos avanzado en esta Nicaragua nuestra hacia una cultura que nos facilita la convivencia, nos entendemos mejor, somos más dialogantes, siempre hay grandes dificultades (…) Todos los que de alguna manera estamos participando como protagonistas en estos cambios que vive nuestra Nicaragua y nuestra sociedad, sabemos que no es fácil, que es complejo (…) pero el privilegio que tenemos de vivir estos tiempos de lucha, que ya no es una guerra como la conocimos en otros tiempos mucho más difíciles, sino tiempos para aceptar y afianzar la paz aprendiendo y el aprendizaje se hace desde la casa, entre la familia, en el barrio, en la comunidad”.

En este sentido, Rosario destacó que el Modelo de Alianzas, Diálogo y Consenso que impulsa el Gobierno: “Un modelo que nos obliga a todos a dialogar y a buscar soluciones a los problemas más difíciles”.

Rosario transmitió sus felicitaciones a todos los consejeros y consejeras que a diario trabajan para rescatar la convivencia en el hogar y en la comunidad.

“Desde el Ministerio de la Familia nos toca a cada uno de nosotros potenciar estos valores, esta capacidad de comunicación y convivencia, que nos va haciendo mejores y que nos va llevando también a que los niños, los adolescentes, los jóvenes aprendan a vivir en un mundo mejor, que es el que consideramos imprescindible de crear, creo que ya lo estamos habitando de alguna manera en nuestra Nicaragua y que no somos todavía capaces de ver, de evaluar, de dimensionar”.

Renovando votos por proyecto Cristiano, Socialista y Solidario

Rosario dijo que la luchar contra la pobreza es para poder seguir hacia rutas de prosperidad que son Trabajo, Amor y Paz.

“Son semanas de mucho trabajo, estas que nos llevan al 6 de noviembre donde tenemos que ratificar nuestros votos por el proyecto Cristiano, Socialista; Cristiano de hermandad, de fraternidad, de amor al prójimo; Socialista de ideales, compartir y crear el reino de Dios en la Tierra; y Solidario, las prácticas solidarias que nos caracterizan en nuestra Nicaragua”.

“Renovar los votos para seguir en Buen Corazón y en Buena Esperanza, como hermanos y como familia nicaragüense. Y bueno, nos sentimos privilegiados en fuerza, energía y ánimo de victoria porque sabemos que tenemos en Nicaragua levantado el corazón hacia el Señor (…) para seguir cambiándonos, en primer lugar cada uno de nosotros, y seguir cambiando el país, y cambiarlo para que todos seamos mejores”.

“Vamos adelante, seguimos adelante este 6 de noviembre, seguiremos fortaleciendo el proyecto de Bien Común cambiando Nicaragua para bien y para mejor”.