"Esta noticia a mi me alegra mucho, porque yo soy una persona eminentemente mariano, y esta noticia que estamos conociendo hoy día viene a decirnos mucho de lo que es realmente es esta petición", dijo Monseñor Montenegro.
El alto prelado añadió que esa petición "es parte de ese orgullo, de eso que está intrínseco en el corazón de los nicaragüenses, como es todo (lo de) la celebración de La Purísima".
Destacó que las celebraciones de La Gritería y La Purísima abarcan una gama de aspectos en los que se involucran prácticamente todos los nicaragüenses.
"Comprende no solamente la Gritería, sino todo lo que está culturalmente detrás de ella: Las comidas, los dulces, el dar, la gente se prepara para dar y la gente en todo el país la celebra el 7 de diciembre", dijo.
Indicó que las celebraciones marianas no se limitan solamente al mes de diciembre sino que se extienden en todas las fiestas que en el año se tienen de La Purísima.
El Gobierno nicaragüense está actualmente documentando la petición que se hará ante la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia, la Cultura y la Educación (UNESCO) para que La Gritería sea declarada Patrimonio Histórico y Cultural, confirmó esta semana el Embajador de Nicaragua, ante ese organismo, compañero Lautaro Sandino.
Las gestiones han despertado el interés de toda la población nicaragüense que ha expresado ya su disposición de respaldar plenamente esa petición ante la UNESCO.
Particular interés han mostrado los habitantes de la ciudad de León, donde esta celebración constituye una de las principales festividades religiosas y en toda la región occidental.
El Obispo de León y Chinandega, Monseñor Bosco Vivas, ha expresado su respaldo a esa iniciativa, tras las gestiones del Gobierno Sandinista que permitieron que la Catedral de León haya sido declarado también Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad.
El certificado correspondiente fue entregado por las autoridades nicaragüenses a Monseñor Vivas en un acto solemne realizado el pasado 28 de septiembre en la ciudad de León.