Como un país maravilloso, con gente calurosa y calurosa, y con bellezas naturales espectaculares que hay que conocer, catalogaron a Nicaragua los delegados de la Comisión Especial de Turismo Sostenible de la Asociación de Estados del Caribe, quienes esta semana estuvieron reunidos en el país.
Las delegaciones de 16 naciones caribeñas recorrieron este fin de semana el Parque Nacional de Ferias de Managua, Granada y el volcán Masaya.
Acostumbrados a visitar distintas partes de América Latina y el mundo, ellos pudieron darse cuenta en apenas estos tres lugares el enorme potencial turístico de Nicaragua y los esfuerzos que se hacen desde el Gobierno y la población para mostrarles a los visitantes lo que significa ser un pueblo lleno de historia y con una riqueza única y original.
Soraya Alderete, Jefa del Departamento de Calidad y Cultura Turística de la Autoridad de Turismo de Panamá, afirmó que en los últimos años ha visitado en varias ocasiones Nicaragua, y que es evidente el desarrollo turístico que se está experimentando.
Señaló que eso va de la mano con la iniciativa de la gente y la buena voluntad de instituciones como el Intur, el cual, como órgano rector del turismo nacional, tiene personal muy capaz y anuente a brindar todas las facilidades y atención tanto a nacionales como extranjeros.
Otro atractivo del país es la seguridad ciudadana. Sorprendidos se sintieron los delegados al poder salir por las noches o durante cualquier hora del día sin miedo a la delincuencia.
“Hemos salido de noche. Ni siquiera en grupos grandes, inclusive en grupos de dos y hemos sentido una paz, una tranquilidad, una Nicaragua renovada, una gente alegre”, dijo Alderete.
Una de las cosas que más les llamó la atención fue el hecho de que en Nicaragua se pueda estar tan cerca de la boca de un volcán activo, tomarse fotos y disfrutar del espectáculo de un lago de lava.
“Aquí nos encontramos en el volcán Masaya, un espectáculo, la verdad nunca había visto nada parecido. Había estado en otro país, en Costa Rica, en un volcán apagado, pero nada que ver con lo que uno puede apreciar aquí”, manifestó Alí Padrón, Vice Ministro de Turismo de Venezuela.
En Granada visitaron las isletas, esos más de 300 trozos de tierra apresados en un recodo del Lago Cocibolca, cuyos canales, mansiones, flora y fauna son una belleza que fácilmente eclipsa los viajes en góndola por la Venecia italiana.
Luego de ese tour por las aguas de lago, se internaron en la ciudad colonial, pudiéndose dar cuenta que los artículos de las revistas especializadas en turismo internacional llegan inclusive se quedarse cortos al describirla.
Visitaron la Calle de la Calzada, la inmensa Catedral, y conocieron un poco de la historia de la ciudad, su arquitectura y los esfuerzos que se han venido haciendo para posicionarla como un polo para el turismo internacional, a tal punto que si en Nicaragua hay un lugar verdaderamente cosmopolita, ese es Granada.
Estando en la ciudad, un lugar que no podían dejar de visitar fue el Convento de San Francisco. Si recorrer las calles de la ciudad es soñar con los tiempos de la colonia, estar en el Convento de San Francisco es un literalmente un viaje al pasado. Los delegados se vieron sorprendidos por las singularidades de la arquitectural colonial, que en el Convento se preserva sin apenas alteraciones.
A la belleza natural y a la riqueza histórica y arquitectónica, había que sumarle la cultura y la idiosincrasia nicaragüense. Desde hace varios años el Parque Nacional de Ferias de Managua se ha convertido en el lugar donde converge todo lo que hace a Nicaragua un país único y original: su gastronomía, las creativas manos de sus pobladores, sus tradiciones, sus frutas tropicales, su diversidad cultural , sus bebidas y, por supuesto, la cálida sonrisa del nicaragüense.
“Veo que hay mucha hospitalidad y es un país muy bonito también”, dijo Daniel Dennis, director de Formación y Capacitación del Ministerio de Turismo de Haití, quien saludó todas las iniciativas de Nicaragua para darse a conocer como un excelente destino turístico a nivel mundial.
Cabe señalar que actualmente el país registra más de 1 millón 400 mil turistas al año. Sin embargo, las proyecciones es que esa cifra continúe creciendo, por lo que el Gobierno trabaja en alianza con los pequeños negocios, los inversionistas extranjeros y el sector privado nacional para ampliar la oferta y mejorar la calidad de los servicios turísticos.