Ciudad de Constanza (Alemania): la “Escuela Geschwister Scholl” puso en marcha una campaña de donación para recaudar fondos a favor de la niñez en edad escolar en este país centroamericano. Desde niños pequeños hasta ancianos de la ciudad de Constanza recorrieron el trayecto.
El aguacero terminó y de nuevo apareció el sol. Y la plaza deportiva comenzó a llenarse de corredores. Desde niños pequeños hasta ancianos de Constanza acudieron a la pista para contribuir a la formación educativa de niños en Nicaragua. La carrera de 24 horas de la “Escuela Geschwister Scholl” (GSS) es la fuente principal de ingresos para el proyecto en Nicaragua. Y también esta vez la Escuela GSS podrá transferir una enorme cantidad a su escuela hermanada en Balgüe. Todavía no se conoce la cantidad exacta, pero se supone que será más de los 24.000 Euros, recaudados en la última carrera hace cuatro años, según dijo Dirk Tinner, Director de la escuela secundaria (GSS).
La meta de correr simbólicamente hasta la escuela hermanada y regresar no se alcanzó en su totalidad: Lograron 15.640 kilómetros, 20.000 es la distancia aérea ida y regreso de Balgüe. “Durante el regreso nos hundimos lastimosamente en el Atlántico”, bromeó el maestro Peter Boos, quien no obstante está orgulloso de este esfuerzo comunal. Se cumplió el deseo de los organizadores que durante las 26 horas siempre estuviera presente una persona en la pista. También a lo largo de la noche por lo menos cuatro personas estaban recorriendo, cuenta el organizador Erick Ruckebier. Un estudiante de 17 años de edad, recorrió 105 vueltas, un ex-maestro de la escuela Scholl logró dos maratones. El mismo llegó a sus límites: ”Por primera vez en mi vida recorrí 36 kilómetros sin pausa, estoy orgulloso como Harry”, dijo Ruckebier.
A pesar del aguacero intermitente este año la carrera por Nicaragua fue la más bonita de los tres anteriores. “El espíritu de comunidad en la escuela se ha fortalecido, logramos conseguir más patrocinadores” según el maestro.
Entre los participantes destacaron las alumnas del sexto grado Maya, Diana, Lea y Kaltrina. Recaudaron más y más pulseras elásticas por cada ronda recorrida. Las muchachas completaron tantos kilómetros como fue posible para ganar el premio de su grado. Pero también pensaron en los niños de Nicaragua.
"No hacemos sólo hacemos deporte, sino también ayudamos a las personas que no tienen las mismas condiciones como nosotras. No sabemos otra cosa que ir a la escuela. Pero los niños en Belgüe enfrentan otras realidades”.
También los bomberos contribuyeron en esta campaña. Sus atletas corrieron por la pista con sus uniformes y equipos completos. “Durante las 24 horas uno de nosotros siempre estuvo activo”, narra el bombero Alan Dittrich. Una presentación impresionante la hizo además la Escuela Wallgut: Todos los alumnos del tercer grado participaron al inicio. “Sólo mi clase recogió 508 Euros y todos se divirtieron mucho”, dijo la maestra Regine Weidmann.
Así se recaudó el dinero
Por cada ronda recorrida los participantes recibieron una suma determinada – la cantidad dependía de cada uno de sus patrocinadores, seleccionados por la Escuela. Con este iniciativa por Nicaragua la Escuela GSS por tercera vez recaudó dinero para su escuela hermanada, el Instituto Nacional Jaime Marzá en Balgüe. Desde el 2005 existe la cooperación, que contribuye a que los niños de esta zona rural asistan a la escuela. La Escuela GSS aporta a las reparaciones en el edifico de la escuela, uniformes, cuadernos y lápices así como dos becas.
(Artículo publicado originalmente periódico alemán “SÜDKURIER”, por Kirsten Schlüter. ENLACE AL ARTÍCULO ORIGINAL).