La joven Martha Ruiz Carballo, originaria de Catarina, Masaya, dio a luz el pasado 12 de abril a su pequeño Mateo, quien nació completamente sano.
Martha fue diagnosticada con zika cuando tenía ocho meses de embarazo.
El bebé nació vía abdominal (cesárea) el día 12 de abril a las 10:00 de la mañana, pesando siete libras.
El anuncio de este feliz acontecimiento fue hecho por la Compañera Rosario Murillo Zambrana, en comunicación con el pueblo a través de los Medios de la Familia y Comunidad.
Desde la sala de maternidad del Hospital Bertha Calderón en Managua, la directora Minolva Espinoza Ruiz, explicó que el bebé “nació en el Hospital Bertha Calderón, fue atendida por un equipo de expertos que tienen más experiencia y especialidades. Desde que la paciente vino al hospital Bertha Calderón se le hizo todo un abordaje médico”.
“Se le hicieron todos los estudios al niño, atendido por un equipo de expertos en la materia y todo salió bien gracias a Dios”, indicó la doctora.
“En el Hospital Bertha estamos haciendo lo que está mandatado por nuestro Presidente (Comandante Daniel Ortega), conformando un comité en todo el hospital para atender a las pacientes y que las madres se vayan tranquilas en su corazón y que lleven la certeza que su niño va totalmente sano”, afirmó.
El adorable Mateo es el primer hijo de esta feliz madre nicaragüense.
“Casi al finalizar mi embarazo se dio este problema (el diagnóstico de zika), pero yo no tenía miedo, confié siempre en Dios y gracias a Dios está ahí bien (Mateo)”.
“Me siento feliz, súper contenta porque tengo sano a mi hijo”, manifestó la joven madre, quien atendió casi todo su embarazo en San Juan de Oriente.
Desde que se dio cuenta que tenía el zika, Martha incrementó los cuidados en su hogar.
“La basura siempre fuera, no tener cosas acumuladas y todo en orden”, enfatizó Martha, quien tiene ocho días de estar en Managua atendiéndose.
Su esposo, el joven Guillermo José Dávila, es un feliz y orgulloso padre, quien asegura que todo es un milagro de Dios.
“La verdad estoy muy contento porque mi bebé está fuera de peligro y agradecidos con Dios por mandarlo sano, siempre confiamos que iba a salir bien y es un milagro de Dios”.