La medida anunciada por el Presidente de la República de Nicaragua, Comandante Daniel Ortega Saavedra, en la que pone en régimen de convivencia familiar a 8,149 personas privadas de libertad, es valorada como un acto humanitario, nunca antes visto en la historia reciente.
El subprocurador de Derechos Humanos, doctor Adolfo Jarquín Ortel, manifestó que “no existe ningún hecho en la historia reciente de un acto así, esto es algo nuevo, algo que se está aplicando que solamente el gobierno que preside el comandante Daniel Ortega y la Compañera Rosario Murillo se han efectuado procedido a liberar a estos privados”.
“Es una decisión que fortalece los derechos humanos, eso indica que en Nicaragua está caminando la política de estado de restitución de derechos, defensa de los derechos humanos y de promoción de los derechos humanos”, subrayó.
Adolfo enfatizó que hablar de libertad de los reos “te indica que se está aplicando la justicia de convivencia familiar, todo basado en un análisis minucioso que ha tomado una comisión integrada por la Procuraduría General de la República, por el Ministerio de Gobernación y por altas autoridades del Poder Judicial, donde se estudió cada uno de los casos y se llevó a la conclusión de darles ese tratamiento a los que son nicaragüenses con delitos menores”.
“Lo más importante aquí es que Nicaragua está cumpliendo con ese deseo de buscar cómo dar mejores condiciones en los sistemas penitenciarios e ir aligerando la carga de población en la cárcel", subrayó Jarquín Ortel.
Año de la Misericordia
Por su parte, el diputado liberal Wilfredo Navarro, apuntó que este régimen permitirá la unión familiar, recordando que este 2016 es el año de la misericordia.
“Yo apoyo esta decisión, estamos en el año donde el Papa (Francisco) ha dicho que este es el año de la misericordia y qué mejor que en Nicaragüense aplique esa misericordia de la justicia para beneficiar a esos hombres y mujeres que cometieron un delito pero que estoy seguro están arrepentidos de ello”.
“Es parte de la generosidad del gobierno, de la solidaridad y del cristianismo que se pregona que se refleja en estas decisiones para el reencuentro de la familia, y que la sociedad les está dando una nueva oportunidad”, sentenció.
“Los reos podrán reencontrarse con sus familias, era necesario que se diera esto por carácter humanitario, se les está dando una nueva oportunidad a los reos para que reinicien una nueva vida”, recalcó.
Finalmente, Navarro recordó que estas personas deberán reportarse a las autoridades de manera regular y de no cumplir uno de los reglamentos que contempla el régimen de convivencia familiar, estarían regresando a cumplir su pena a la cárcel.
“Aquí hay una serie de condiciones, tiene que ver la edad del reo, ver su comportamiento en la cárcel, ver si ha cumplido parte de su condena, ver si tiene una situación muy peculiar, y eso son los casos que se van a ver, no vamos a sacar a asesinos rematados ni mucho menos, estos son gente que tienen penas de menos de cinco años, entonces se trata de delitos menores, además control y supervisión de las autoridades sobre el comportamiento de estas personas, condiciones que hacen que cumpla la ley”.
Asimismo, el ingeniero Telémaco Talavera, vocero de la Comisión del Gran Canal Interoceánico de Nicaragua, afirmó que se está trabajando para seguir construyendo la paz.
“No estamos trabajando para que hayan más cárceles, sino más paz, menos delitos comunes y de todo tipo”.
Recordó que desde las cárceles hay un régimen educativo que permite a los privados de libertad adquirir nuevos conocimientos que los forman para ser nuevos ciudadanos al cumplir su condena.
“Esta misma universidad tiene un programa de formación en las cárceles de hombres y de mujeres. Desde nuestro país y nuestras universidades promovemos realmente el sistema carcelario como un sistema de transformación para quienes cometen un delito para cuando salgan de la cárcel puedan incorporarse por el bien de ellos y la comunidad”, finalizó Talavera.