Ambos organismos regionales firmarán este convenio el próximo viernes en Tegucigalpa, Honduras, con los presidentes de todos los países de Centroamérica, incluyendo Panamá, como testigos de honor.

El funcionario destacó las diferencias entre este acuerdo y los Tratados de Libre Comercio (TLC) de carácter bilateral para intercambiar libremente ciertos productos entre dos países, pues el arreglo de región a región contempla tres grandes pilares referentes a lo comercial, la cooperación y la política.

Por primera vez en la historia se firma un acuerdo con los 27 países europeos de una sola vez, que están representados en la parte económica por la Comisión Europea, señaló.

Según el Ministro, existe un antecedente en el Acuerdo suscrito en 1984 de región a región en torno a la cooperación económica y comercial para el desarrollo, pero el nuevo convenio, cuya parte económica entraría en vigor en diciembre de este año, es mucho más amplio.

Con el acuerdo se consolidan las preferencias que Europa ha estado concediendo bilateralmente a Nicaragua y a los países centroamericanos en el Sistema Generalizado de Preferencias, que es un mecanismo de Naciones Unidas, explicó.

Además instituirá una disminución de los aranceles, significa que en lugar de cobrarnos un 30 o 40 por ciento del impuesto a los principales productos exportados los dejan al cero o al cinco por ciento, y se agregan otras concesiones, sostuvo en declaraciones al canal 4 de televisión.

Entre otras oportunidades abre el acceso a mercados ilimitados prácticamente en 27 países europeos con buena capacidad de compra, al mismo tiempo impone requisitos de calidad muy estrictos que demandarán a Nicaragua una diversificación de sus productos, indicó Solórzano.

Independientemente de que el país haya elegido la carne y los quesos como principales productos para comerciar, Nicaragua precisa ahora aumentar su producción y agregar valor de acuerdo a normas de calidad para aprovechar a plenitud el nuevo acuerdo, señaló.