Con el objetivo de estar preparados ante posibles eventos sísmicos, autoridades de diferentes centros estudiantiles de la capital participaron de un simulacro en el que la comunidad estudiantil participó en su totalidad. Al sonar el timbre de los colegios, los jóvenes y niños procedieron a auto evacuarse de sus aulas de clase haciendo uso de las rutas de evacuación ya establecidas para dirigirse a las zonas de seguridad.

De manera simultánea los Colegios Camilo Zapata, San Sebastián, Clementina Cabezas, Centro Escolar Salomón Ibarra, Colegio Josefa Toledo, Escuela Normal Alesio Blandón y Colegio Villa Dignidad se sumaron al ejercicio, permitiéndoles a los estudiantes tener dominio de la situación logrando así actuar correctamente ante la sismicidad.

“El ejercicio lo hicimos en tres minutos con 24 segundos, logrando desarrollarlo con mucho éxito, nuestros niños han aprendido a atender el llamado que nosotros hacemos a la señal que indica que se nos está presentando un sismo. En total contamos con 675 niños matriculados en la modalidad de pre- escolar, primaria en el turno matutino, ellos junto a sus maestros se desplazaron a la zona de seguridad establecida” señaló María Teresa Chávez, directora del centro Camilo Zapata.

Previo al ejercicio, los maestros indicaron a sus alumnos la importancia de este tipo de actividades, tomando en cuenta que los conocimientos que adquieren en la casa de estudio sobre las normas de seguridad a efectuar, también pueden desarrollarlas en sus viviendas.

“A través de los simulacros nuestros niños van a prendiendo cómo deben de salir de las aulas de clases o de sus casas al momento que se presente un sismo, nosotros les hemos orientado que deben salir en hilera con la mochila en la cabecita por cualquier material que les pueda caer encima y los llamamos a mantener la calma” dijo Tania Jarquín, docente.

Los pequeños aún inquietos por la actividad realizada, destacaron que sus profesores les han venido capacitando a lo largo de las semanas anteriores en las que de igual manera han participado de actividades similares.

“Si tiembla tengo que caminar hacia un lugar en el que no hayan árboles y cables de energía, siempre tenemos que ponernos la mochila en la cabeza como una manera de protección en caso de que me caiga algún objeto” dijo Andrea Vanegas.

“Cuando haya un temblor debemos de salir con calma, sin correr porque podemos caernos y los demás compañeritos nos pueden golpear, todos debemos salir de las aulas y ubicarnos en la cancha porque ahí vamos a estar más seguros” manifestó el pequeño Misael Portocarrero.

De esta manera el Gobierno Central a través del Ministerio de Educación trabaja en el desarrollo del modelo de prevención ante eventos de mayor magnitud, logrando así inculcar en la niñez y juventud los conocimientos básicos y necesarios para actuar adecuadamente sin entrar en pánico y desesperación.