El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, aseguró hoy en la VII Cumbre de las Américas, con sede en Panamá, que el combate al narcotráfico y el crimen organizado debe tener un enfoque regional.
Para erradicar décadas de corrupción e impunidad, narcotráfico, terrorismo, lavado de activos y sus trágicas secuelas es mejor hacerlo de manera integrada, afirmó ante los representantes de los 35 países que asisten a la cita continental.
Hernández recalcó que aún falta mucho por hacer en lo referido a la seguridad ciudadana, y argumentó que un abordaje regional del fenómeno es esencial para avanzar en este tema.
Honduras es uno de los países más violentos del planeta, con una tasa de homicidios en 2014 de 68 por cada 100 mil habitantes, el equivalente a unas 16 muertes diarias, según datos del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de ese país.
El presidente recordó que entre el 80 y 90 por ciento de la violencia en Centroamérica tiene su raíz en el narcotráfico.
Durante su intervención en esta segunda y última jornada de la cumbre, Hernández consideró que cada día el continente consolida más la paz, pero tiene importantes desafíos por resolver.
La generación de empleos, la cobertura y calidad de los sistemas educativos, la seguridad alimentaria y servicios básicos de salud, las inversiones y reducir de manera sostenida la pobreza fueron algunos de los retos que mencionó.
Asimismo, celebró los progresos de los gobiernos de Estados Unidos y Cuba -país que participa por primera vez en esta cita- en alusión al proceso de restablecimiento de relaciones diplomáticas.
Ello, acotó, servirá como impulso para alcanzar una nueva era en América.