Los tiangues de la avenida Bolívar a Chávez se han constituido en el lugar de encuentro de las familias nicaragüenses y los pequeños productores, aquí sin intermediarios, los primeros compran a precios muy solidarios, mientras que nuestros campesinos logran mejorar sus ventas.
El fin de semana unos 80 pequeños agricultores y dueños de negocios, ofertaron una amplia variedad de productos, sobre todo hortalizas, refrescos, plantas, medicina naturista, queso y crema, entre otros, los que prácticamente se agotaron cuando caía la tarde del domingo.
El compañero José Manuel Matute, del Ministerio de Economía Familiar y Comunitaria (MEFCCA), explicó que se ha dado priorizado los pequeños negocios de producción, incluyendo la medicina natural, las hortalizas, frutas y vegetales.
“Es una puerta que se le abre a los productores y a los pequeños negocios con los que hemos venido trabajando en el 2014 en el Parque Nacional de Ferias, ahora tenemos estas dos nuevas plataformas que le sirven para promocionar sus productos, para que la gente pueda adquirir productos de calidad a buen precio”, expresó Matute, director de promoción y comercialización de pequeños negocios del MEFCA.
La pequeña productora de rosquilla de Somoto, doña Karla Mendoza, dijo sentirse orgullosa, porque a través de los espacios que le permite el Gobierno Sandinista, su familia vive en mejores condiciones.
“Soy una mujer sola, tengo mi familia (hijos) y con estar viniendo aquí he sacado a mis hijos adelante y por eso me siento orgullosa porque si no fuera por nuestro gobierno no estuviéramos aquí, que Dios lo guarde, lo cuide y lo siga usando (al comandante Daniel Ortega) y cuantas veces lance su candidatura (presidencial) vuelvo a votar por él”, dijo Mendoza.
Estos tiangues además de promover la venta de estos pequeños productores, igual son creadores de empleos, tal es el caso de la señora María Eugenia Herrera que le trabaja a una pequeña productora de chicha de maíz.
“Se ayuda ella (la dueña del pequeño negocio) y ayuda a las demás personas para que vengan a trabajar, ella está en el Parque de feria y me manda aquí (al tiangue) todos los fines de semana. Esto viene en cadena, se beneficia ella y me beneficio yo porque me da trabajo”, dijo doña María Eugenia.
Y al momento que doña María nos terminaba de hablar, la compañera Maritza Reyes le compraba una sabrosa chicha de maíz helada e indicaba que los tiangues permiten a las familias distraerse y comprar productos nacionales a precios favorables.
“A nuestra familia le ha gustado, es la primera ocasión que venimos y nos ha gustado”, dijo Reyes.