Los productores apícolas en conjunto con el Gobierno de Nicaragua están desarrollando un plan de trabajo que les permita aprovechar las potencialidades que brinda la miel de abeja.
La miel representa importantes ingresos económicos resultado de la exportación, pero también es conocida su aplicación en tratamientos médicos y en la fabricación de veladoras y otros productos.
La titular del Ministerio de Economía Familiar y Comunitaria, María Antonieta Machado, asegura que el Gobierno trabaja directamente con 1,400 apicultores a quienes se está buscando dotarlos de capacidades técnicas y por tanto mejores herramientas para el manejo de este importante rubro económico.
Machado expresa que hasta hace poco la producción de miel se hacía de manera empírica, de allí lo primordial de seguir avanzando en los procesos de capacitación.
Ello es de vital importancia ya que se prevé que el país exporte en este 2014 más de 800 toneladas de miel.
“El tema de los sub productos es una de las cosas y de los desafíos que tenemos que trabajar con ellos”, afirma Machado, señalando que la cera es un producto que está requiriendo valor económico debido a su potencial de exportación.
Otro de los desafíos lo representa el consumo interno, el cual de acuerdo a la Ministra es muy poco a pesar de su importancia nutricional.
Sumado a ello también los apicultores y el Gobierno están trabajando en el registro de marca, el envase y todo lo requerido para darle valor agregado.
Freddy Cruz, apicultor del departamento de Rivas, asegura que la asistencia que el Gobierno le ha dado a los aproximadamente 300 productores de miel de esa zona del país ha sido muy buena ya que además de capacitaciones aporta recursos financieros para el mejoramiento de la producción.
El productor expresa que el 85% de la miel nacional se exporta a granel, lo cual implica precios bajos. Por ello el objetivo ahora es avanzar en dotar de valor agregado a este producto.
Las alianzas para los apicultores son vitales ya que les permiten acceder a mayores conocimientos para aprovechar todos los recursos de la colmena, de acuerdo a José Bermudez, productor de San Francisco Libre, departamento de Managua.
Cabe mencionar que la sequía tuvo efectos negativos en la producción de miel, a tal punto que casi el 30 por ciento de las colonias (colmenas) se perdieron. No obstante, las lluvias de las últimas semanas están permitiendo la floración y con ello un repunte en la producción.