Nicaragua se desbordó para cantarle a la Virgen Inmaculada Concepción de María este 7 de diciembre, día en el que se celebra la Gritería.
En Altagracia, Managua, como es tradición, Idalia de los Ángeles Mendoza, conocida como la profesora, como parte de la tradición familiar, se ha preparado para celebrar a la madre de Jesucristo.
"Mi mamá celebraba de manera humilde la Purísima y ahora ella tuviera 77 años de celebrarla, pero ahora nosotros como familia nos unimos para cantarle a María. A nuestra imagen vienen a verla los vecinos, a ponerle una veladora, a rezarle, a orarle y a expresarle el amor a la Virgen", dijo Idania.
"Queremos decirle al pueblo que el altar nuestro es pura plantas, acá tenemos 145 variedades de plantas y siempre el lema de la celebración es que la Virgen María nos proteja y nos cuide con un medio ambiente agradable, limpio que purifique el agua y que purifique el aire", expresó.
"Estamos llenos de alegría y de amor esperando a todos los pobladores y comienzan a bajar desde las 3 de la tarde. Nuestro brindis es variado porque damos lo tradicional como es el ayote en miel, alfajores que aquí se le llama también gofio, tenemos chicha de maíz y con jengibre, tenemos caña, banano, naranjas y además tenemos escobitas, chichiles, indios, aceites, matracas, para lavar los trastes, arroz, sopa Maggi y las infaltables tacitas para los niños y las que van con tapa que sirven para guardar comida", detalló la profesora.
Asimismo, Blanca Estela Cerda y su esposo Lesther Dávila llevan 6 años cumpliéndole a la Virgen, quien les hizo dos milagros que han llenado de felicidad sus vidas.
"Nosotros celebramos a la Virgen María porque un 7 de diciembre nos dimos cuenta que estábamos embarazados y se suponía que no podía ser mamá, ese fue el primer milagro que nos hizo la Virgen, después en mi parto que fue para el 2018 con todo el alboroto que hubo me miré mal casi no morimos las dos, entonces yo le pedí a la Virgen que si salíamos bien le íbamos a celebrar un año a la Virgen, después a los 7 meses nuestra hija presentó un grave problema intestinal y le hicieron tres cirugías en una y le pedimos que si la niña salía como que si nada le había pasado haríamos la Purísima con más fervor", contó Blanca Estela.
"Pasamos ahorrando prácticamente todo el año, de poquito en poquito hasta llegar a la fecha que hoy 7 de diciembre. Tenemos mucha fe y mucho fervor. Buscamos siempre dar cosas tradicionales, pero también cosas útiles que puedan servir en el hogar como panas, jabones, arroz, azúcar, aceite, es una tradición que pensamos conservar y transmitirla a nuestra hija", manifestó Lesther.
Finalmente, Lesbia Sánchez, lleva nueve años realizando esta promesa para honrar a la madre del Señor Jesucristo.
"Es una promesa para la familia, por favores que ha recibido nuestra familia. Tengo cinco hijos y desde junio empezamos todos a ahorrar y a ir comprando las cosas que vamos a necesitar para la Purísima", culminó Lesbia.