La Compañera, Vicepresidenta Rosario Murillo, dijo que recordar es volver a vivir, aquellos días terrible de septiembre de 1973, cuando una tragedia y crimen impuesto a miles de chilenos y chilenas, que no solamente cobró vidas, sino sufrimiento y dolores impuestos por la voracidad de los imperios.

"Hoy, compañeros, compañeras, hemos vivido, porque recordar es volver a vivir aquellos días terribles de septiembre de 1973, cuando esa tragedia, esa tragedia, ese crimen, ese magnicidio, ese sufrimiento impuesto a decenas de miles de chilenos y chilenas, no solo cobró vidas, sino tanto sufrimiento que causó tanta desgracia, tanto dolor, y sobretodo cuando uno sabe que son desgracias, sufrimientos, dolores impuestos por la voracidad de los imperios. Hemos recordado, hemos vivido y hemos recordado esos días, cuando en los medios de comunicación se reflejaba el sufrimiento de miles, porque no solo estamos hablando de las más de 40 mil víctimas, sino de las familias, de los vecinos, de los familiares de los amigos, de los compañeros y compañeras de las víctimas, un pueblo entero sufriendo y un continente, y un mundo entero viviendo la desgracia, el desastre, impuesto como siempre por los imperialistas de la tierra", mencionó.

Agregó que "y nosotros aquí en Nicaragua que sufrimos, que hemos sufrido tantas agresiones, intervenciones, ocupaciones, presencia de ese poder maldito de los imperios, sabemos lo que significan esos dolores esas tragedias, esos sufrimientos y esas valentías, esos son dolores, tragedias, sufrimientos impuestos para pretender cercenar las valentías, el heroísmo, el atrevimiento, porque los pueblos nos hemos atrevido y nos seguimos atreviendo a desafiar la imposición, o la pretensión de sometimiento de los imperialistas de la tierra; vivimos esos días con dolores y repudio, y rechazo, y condena, y en esos tiempos vivíamos aquí bajo esa misma bota imperialista, pero luchando, como el pueblo chileno supo luchar, como ese pueblo chileno con el que estamos tan unidos, porque además dejaron sangre santa, abonando, regando los caminos de liberación en Nicaragua, cuántos hermanos y hermanas chilenas cayeron, dieron su vida, por el pueblo y la patria nicaragüense que exigía libertad, que luchaba con dignidad, que logró el triunfo el 19 de julio".

"Unidos en batallas, y unidos en victoria decimos nosotros, con ese Chile, de Salvador Allende, Presidente, Combatiente, Presidente de la Dignidad, con ese Chile de tantos hermanos y hermanas, porque nos queremos mucho los pueblos nicaragüenses y chilenos, con ese Chile, del inolvidable, eterno Víctor Jara, con ese Chile, de tanto combatiente y militante que sacrificaron y desaparecieron, pero ahí está, ahí está el fuego y la llama sagrada inapagable, y sabemos que los pueblos vamos adelante, en hermandad luminosa vamos adelante, en hermandad soberana vamos adelante luchando para vencer; y le decimos, como siempre les hemos dicho, no pasarán, hay eventos y momentos que parecieran que los golpes se imponen como aquí en el 2018, pero no, los pueblos dignos, valientes, los pueblos nobles, sabemos identificar nuestro legado y caminar valientemente nobles en hidalguía, en brillo perpetuo, valientemente hacia las victorias", dijo.

"Un abrazo a todo ese gran pueblo de Salvador Allende, tantos compañeros y compañeras de Víctor Jara, y un abrazo a los familiares también de los héroes chilenos que dieron su vida por la libertad, la dignidad, el decoro, de nuestra patria nicaragüense, patria somos todos, los pueblos que luchamos por la justicia, la verdad, la memoria verdadera, la historia verdadera, por la restauración de nuestros caminos, por la no repetición, por la reparación, de tanto sufrimiento y destrucción, y no repetición, y por eso aquí nosotros decimos como en tantos otros lugares del mundo, donde se defiende la paz con agallas, décimos con la paz no se juega, con la paz no se juega, con la paz definitivamente no se juega, sabemos luchar, sabemos combatir con esperanza y amor, sabemos vencer", finalizó.

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