Las autoridades del Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (Marena) destacaron los trabajos del Gobierno de Nicaragua en función de proteger, restaurar y conservar a las especies marino costeras que cada año arriban a las playas nicaragüenses.

Para ello, la Ministra del Marena, Juana Argeñal, resaltó los esfuerzos interinstitucionales que el gobierno ejecuta para la realización de investigaciones sistemáticas y frecuentes, además de la vigilancia a cada una de las especies marino costeras de Nicaragua.

A la luz de los últimos estudios, realizados por centros de investigaciones especializados en estudios acuáticos, Argeñal desmintió la aparente muerte masiva de tortugas marinas que algunos medios de comunicación habían mal informado con anterioridad.

Al respecto, Argeñal informó que en el monitoreo realizado por la embarcación Princesa I, que estaba ubicada en alta mar a una distancia de 15 a 20 millas náuticas en la zona sur de Nicaragua, no se encontró tortugas muertas.

“Los estudios científicos que han realizado los barcos del Inpesca y a través de los patrullajes acuáticos que ha realizado Marena en conjunto con la Fuerza Naval, no nos reportan esas cantidades de mortandad de tortugas”, explicó.

La ministra recordó que a través del Marena, el gobierno mantiene de forma sistemática un plan de prevención y conservación, el cual se ejecuta desde el 2007, cuyo fin es proteger a las tortugas marinas, principalmente en los refugios de vida silvestre de Chacocente y La Flor.

Además dijo que en conjunto con los pescadores y el Instituto de la Pesca (Inpesca) se está trabajando para implementar un sistema de control y monitoreo de las especies marinas, trabajando paralelamente con los pescadores para disminuir los métodos de pesca que son nocivos para la especies, como es el uso de la bomba en altamar.

En cuanto a la disminución de arribada de tortugas a las playas nicaragüenses en los meses de junio y julio, Argeñal aseguró que el gobierno está investigando este fenómeno que también se presentó en el año 2010.

Indicó que una investigación realizada con el Centro de Investigaciones de Ecosistemas Acuáticos (Cidea) de la Universidad Centroamericana, determinó que la temperatura de las aguas en la zona sur de Rivas es normal, indicando que la poca presencia de tortugas no está asociada a fenómenos naturales o al impacto del cambio climático.

A pesar de la poca afluencia de tortugas en los meses de junio y julio, Argeñal destacó que en septiembre se ha registrado arribadas masivas que se calculan entre 5 mil y 8 mil tortugas.