En un futuro próximo la Tierra sufrirá las olas de calor más extremas por el cambio climático. A finales de este siglo podrán sacudir el 85% de toda la superficie del planeta, según investigadores de Alemania y España.
"Hasta 2040, la frecuencia de los episodios de calor extremo va a aumentar, independientemente de las emisiones de gas de efecto invernadero a la atmósfera", dice un estudio de Dim Coumou del Instituto de Potsdam para la Investigación del Impacto Climático y Alexander Robinson de la Universidad Complutense de Madrid. Los científicos afirman que en la primera mitad de este siglo las 'olas de calor', períodos con temperaturas medias mensuales anormalmente altas, se convertirán en un fenómeno cada vez más común.
Según su estudio, publicado por la revista científica 'Environmental Research Letters', las olas de calor excepcionales (3 sigma) van a afectar al doble de zonas en 2020, y en 2040 este territorio se duplicará otra vez. Para ese año, los fenómenos climáticos todavía más extremos -5 sigma- como prácticamente no se conocen ahora afectarán al 3% de la superficie del globo. Después de esta fecha, dependerá de la cantidad de GES que se emitan a la atmósfera.
Si se aplican medidas de mitigación eficaces y las emisiones descienden sustancialmente, los efectos positivos empezarían a observarse hacia el año 2040. Esto significa que a finales de siglo, las olas de calor excepcionales se convertirán en algo habitual en los trópicos, el 50% de los veranos en Sudamérica y en África occidental, y el 20% en Europa occidental.
En el caso de que sigan incrementándose las emisiones de gas, el modelo climático de los científicos pronostica que para el año 2100 las olas de calor 3-sigma se producirían en el 85% del planeta y las de tipo 5, en el 60%.