La impopularidad de la Presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, ha llegado a niveles tan bajos, que no se recuerda en América Latina un mandatario o mandataria que haya tocado el fondo del barril de una manera tan alarmante.

Los costarricenses, a “soto vocce”, ruegan con profunda devoción que el tiempo pase vertiginosamente y finalice el período presidencial de Chinchilla, a quien consideran la causa de todos sus males económicos, sociales y políticos.

Y como sucede normalmente con presidentes impopulares como la mandataria Chinchilla (a quien respetamos como mujer y presidenta), buscan desviar la atención de sus desgobiernos y culpar a otros de lo que no ha podido realizar a favor de sus gobernados.

Pero el pueblo costarricense la ha aplazado con contundencia, pues el 80 por cientos de ciudadanos, según diversas encuestas, manifiestan su descontento con la forma cómo ha gobernado: la economía por el suelo, el desempleo galopante, la inseguridad ciudadana de día y de noche puesta en riesgo a cada momento y la corrupción corre galopante por todas las estructuras del poder gubernamental.

Para desviar la atención de todos esos males que le ha caído el pueblo costarricense, ahora resulta que la presidenta “tica” la emprende contra el Gobierno Sandinista liderado por el Comandante Daniel Ortega y la Primera Dama Rosario Murillo.

Según Chinchilla, el Gobierno Sandinista ha entregado a extranjeros la concesión petrolera en el Caribe nicaragüense y la construcción del Canal Interoceánico y por presuntamente invadir áreas marítimas de su país.

Pero resulta, Señora Chinchilla, que es precisamente este Gobierno Sandinista el que, por primera vez en nuestra historia republicana, ha defendido por todos los flancos NUESTRA SOBERANIA NACIONAL.

A la presidenta de Costa Rica se le ha olvidado o no quiere recordar, que la Corte Internacional de Justicia (CIJ), de la Haya, en un histórico fallo del 22 de noviembre del 2012, regresó a Nicaragua lo que por siglos le ha pertenecido en el Mar Caribe, territorios marítimos que le habían sido usurpados.

Para dejar bien claras las cosas, el Jefe del Ejército de Nicaragua, General Julio César Avilés, le respondió con contundencia a la Presidenta Chinchilla: “El fallo de la CIJ que definió los límites de Nicaragua y Colombia en el (Mar) Caribe es invariable y desde noviembre pasado Nicaragua ha ejercido SOBERANIA en las áreas cuyos derechos le fueron restituido. Nicaragua ejerce SOBERANIA en esa zona desde el 25 de noviembre del 2012, cuando se puso en marcha la MISION DE PAZ Y SOBERANIA, GENERAL AUGUSTO C. SANDINO.

Ahora quisiera recordarle al gobierno costarricense que la Administración Sandinista tiene toda la potestad de conceder permiso para exploraciones petroleras en el Mar Caribe y construir el Canal Interoceánico.

Y esas dos monumentales obras llegarán a feliz término porque, con eso, se cumplirá el más grande sueño del binomio presidencial Ortega-Murillo: terminar de una vez por todas con la pobreza en Nicaragua.

Como una cosa lleva a la otra, mientras la aceptación de la mandataria costarricense se desploma día a día, en Nicaragua la popularidad de Daniel y Rosario se consolida entre un pueblo nicaragüense que ha visto cómo florecen por todo el país el bienestar común, la seguridad, el empleo, el combate frontal a la pobreza, la atención decidida a los jóvenes, mujeres y niños.

Es por eso que el pueblo nicaragüense escogió a Ortega y Murillo para que conduzcan este barco que navega sin detenerse con la meta puesta en un presente y futuro de bienestar para todos nuestros compatriotas, sin discriminaciones, en 4n gobierno de unidad nacional y reconciliación.

Lo que hacen el Comandante Ortega y la Primera Dama Rosario Murillo a favor del pueblo nicaragüense, es lo que debería hacer la Presidenta Chinchilla en su país, y no intentar desviar la atención de los gravísimos problemas por los que pasa el pueblo costarricense.

Entonces, nada ni nadie en el presente y futuro nos arrebatará lo que por ley y justicia nos pertenece. El pueblo, EL SOBERANO, sabrá defender por todos y con todos los medios NUESTRA SOBERNIA EN EL MAR CARIBE.