Cinco cadáveres fueron encontrados este martes con lo que la cifra de fallecidos aumentó a 94 luego de registrarse un terremoto de 6.6 grados de magnitud en la escala de Richter en Gansu (noroccidente de China).
Autoridades locales de la Administración de Terremotos de China confirmaron que más de 226 mil personas fueron evacuadas hacia zonas seguras y que se mantienen las labores de rescate y asistencia a las comunidades que fueron afectadas por el movimiento telúrico.
Agregaron que además de las 94 muertes hay más de mil heridos, sin contabilizar las personas que continúan desaparecidas.
Añadieron que en los próximos días habrá fuertes lluvias lo que se pudiera dificultar las tareas de rescate que mantienen la búsqueda de personas entre los escombros, así como las misiones de traslado y atención de desplazados por el terremoto.
El gobierno chino pidió el lunes que se agilicen las labores de ayuda en las que están más de dos mil soldados, equipos médicos y unos 300 policías. La administración del presidente Xi Jinping envió a la zona afectada 10 mil tiendas de campaña y 30 mil sábanas como avanzada de los recursos que se destinarán para la recuperación.
Voceros del gobierno dijeron a los medios de comunicación que destinaron al menos 830 mil dólares (5 millones de yuanes) para financiar las labores de restauración, reparación y atención para los afectados.
De acuerdo con especialistas, está contabilizado al menos 52 mil hogares completamente destruidos y 240 mil viviendas con severas muestras de daños en sus estructuras.
El oeste de China es una zona de frecuente actividad sísmica. En abril pasado, un temblor de magnitud 6,6 provocó la muerte de casi 200 personas en Sichuan (centro), la misma provincia donde en 2008 otro sismo de magnitud 8.0 dejó casi 90 mil personas fallecidas.
