23 de Abril, 2021

Nueva York, Nueva York

Nicaragua participó hoy en el Debate General del tema “Seguimiento del documento final de la Conferencia Mundial sobre los Pueblos Indígenas y de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”.

El Foro Permanente para las Cuestiones Indígenases un órgano asesor del Consejo Económico y Social (ECOSOC) y su mandato es examinar las cuestiones Indígenas, en el contexto de las atribuciones del ECOSOC, relativas al desarrollo Económico y Social, la Cultura, el Medio Ambiente, la Educación, la Salud y los Derechos Humanos.

La Delegación de Nicaragua destacó como una Victoria Nacional, la demarcación y titulación de 23 territorios de Pueblos Originarios y Afrodescendientes desde el año 2007, integrados por más de 301 comunidades que abarcan una extensión territorial superior a los 37,252.91 kms2, con más de 205,315 habitantes, representando el 49% del territorio nacional, el 52% del territorio de las Regiones Autónomas y la Zona del Régimen Especial del Alto Wangki, Wihta y Bukawas.

Este porcentaje podría aumentar en el año 2021, al concluirse el proceso de demarcación y titulación de las dos áreas complementarias de la Zona del Régimen Especial del Alto Wangki y Bocay.

La Delegación también destacó que en respuesta a la Pandemia del COVID-19, desde el 21 de Enero 2020, el Ministerio de Salud (MINSA) realizó su primera Conferencia de Prensa para advertir a la población sobre el riesgo del SARS-CoV-2 y el COVID-19; aunados a los esfuerzos nacionales de prevención.

En la Costa Caribe se desarrolló una campaña educativa para informar a la población sobre las medidas de prevención, traduciendo los mensajes al inglés, miskito y mayagna, imprimiendo panfletos y afiches y realizando transmisiones a través de programas radiales, televisivos, páginas web y redes sociales.

Asimismo, se conformaron brigadas para llevar a cabo visitas educacionales “casa a casa” en cada una de las comunidades indígenas y afrodescendientes, procurando la captación temprana de personas sintomáticas, así como para el seguimiento responsable y cuidadoso de aquellos que entraron en contacto con personas COVID-19 positivas.

El Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional de Nicaragua estuvo representado por l@s Compañer@s Carlos Alemán Cunningham, Coordinador del Gobierno Regional Autónomo de la Costa Caribe Norte (GRACCN), Jaime Hermida Castillo, Embajador, Representante Permanente de Nicaragua, Jasser Jiménez, Embajador, Representante Permanente Alterno de Nicaragua y Juana Sandoval, Tercer Secretaria de la Misión Permanente de Nicaragua ante las Naciones Unidas.

Señora Anne Nuorgam, Presidenta de la 20 sesión del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas.

Compañero Carlos Alemán Cunningham, Coordinador del Gobierno Regional Autónomo de la Costa Caribe Norte (GRACCN).

FORO

Señora Anne Nuorgam, Presidenta de la 20 sesión del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas.

 

Intervención del Compañero
Carlos Alemán Cunningham

 

20 Período de Sesiones del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas, Nueva York, 19-30 de abril, 2021.

 

Debate sobre el tema: “Paz, justicia e instituciones eficaces: el papel de los pueblos indígenas en el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible 16”.

Honorable Señor Munir Akram, Presidente del Consejo Económico y Social (ECOSOC),

Honorables miembros del Foro Permanente para Cuestiones Indígenas,

Hermanas y Hermanos todos,

La Constitución Política de la República de Nicaragua de 1987, sienta las bases para una concepción de la nación nicaragüense multiétnica y pluricultural, celebrando y promoviendoel desarrollo de las tres vertientes que nutrenla identidad nicaragüense: la indígena-originaria, la Afrodescendiente y la europea. 

El Estado de Nicaragua reconoce la existenciade los Pueblos Originarios y Afrodescendientes, que gozan de derechos, deberes y garantías consignados en la Constitución y en especial, lo referido al desarrollo de su identidad cultural, la administración de sus asuntos locales, el uso racional y sostenible de sus tierras y recursos naturales, entre otras. Por ello, en 1987, se aprueba la Ley No. 28, Ley de Autonomía de los Pueblos Originarios y Pueblos Afrodescendientes de la Costa Caribe de Nicaragua.

Autonomía, se define como “El reconocimiento y ejercicio efectivo de los Derechos políticos, económicos, sociales, culturales y ambientalesde los Pueblos Originarios y Pueblos afrodescendientes de la Costa Caribe de Nicaragua, en el marco del respeto a la diversidad étnica y cultural, como única garantía para la construcción de una Genuina Unidad Nacional.”

Estas legislaciones constituyen la punta de flecha del Estado de Nicaragua para la construcción de un marco jurídico y político que contiene acciones dirigidas a la visibilización de los pueblos indígenas y afrodescendientes en las políticas públicas, así como en el más amplio quehacer nacional, procurando siempre la mejora continua de sus condiciones de vida conforme a sus costumbres y tradiciones.

Estas legislaciones fundamentales sentaron lasbases para la aprobación de leyes y políticas dirigidas a la preservación de las lenguas autóctonas y su uso oficial en las regiones autónomas; el rescate de la medicina tradicional; la implementación de la educación bilingüe intercultural; la elección de autoridades indígenas y afrodescendientes en sus propios territorios y comunidades; la conducción de procesos de consulta previa, libre e informada para el desarrollo de proyectos públicos o privadas en propiedad comunal indígena u afrodescendiente; entre otros importantes logros.

Es importante destacar como una victoria nacional, la demarcación y titulación de 23 territorios de Pueblos Originarios y Afrodescendientes desdeel año 2007, integrados por más de 301 comunidadesque abarcan una extensión territorial superior a los 37,252.91 kms2, con más de 205,315 habitantes,representando el 49% del territorio nacional, el 52% del territorio de las Regiones Autónomas y la Zona del Régimen Especial del Alto Wangki, Wihta y Bukawas. Este porcentaje podría aumentar en el año 2021, al concluirse el proceso de demarcación y titulación de las dos áreas complementarias de la Zona del Régimen Especial del Alto Wangki y Bocay.

La demarcación y titulación de tierras indígenas y afrodescendientes contribuye al ejercicio efectivo del Derecho a la Libre Autodeterminaciónpermitiendo la elección periódica de gobiernos y asambleas comunales y territoriales, todas electas mediante normas tradicionales y estatutospropios de los Pueblos Originarios y Afrodescendientes y plenamente reconocidas por el Estado de Nicaragua. 

Cada Territorio cuenta con un Plan de Desarrolloy recibe una partida presupuestaria del PresupuestoGeneral de la República para su implementación. Asimismo, los gobiernos y asambleas comunales y territoriales deciden acerca de la implementación de proyectos de inversión pública o privada, previa la celebración de procesos de consultalibre e informada que garantizan la preservación de su acervo cultural y formas tradicionales de vida, la protección del medio ambiente, el uso racional y sostenible de sus recursos naturales y el bienestar de su población.

Ello contribuye a reducir la inseguridad jurídica en cuanto a la propiedad y permite definir mejores mecanismos de convivencia comunitaria, la reducción del avance de la frontera agrícola, la erradicación de prácticas productivas adversasal desarrollo de los bosques, suelos y cuencas de ríos y lagunas, así como la resolución pacífica de conflictos entre campesinos, indígenas y afrodescendientes. Todo lo anterior representaun reto de singular importancia para el Estado de Nicaragua, dado se requiere de recursos humanos y financieros significativos para monitorear un área tan extensa.

En respuesta a la Pandemia del COVID19, desde el 21 de enero, 2020, cuando el Ministerio de Salud (MINSA) realizó su primera Conferencia de Prensa para advertir a la población sobre el riesgo del SARS-CoV-2 y el COVID-19; aunados a los esfuerzos nacionales de prevención, en la Costa Caribe se desarrolló una campaña educativa para informar a la población sobre las medidas de prevención, traduciendo los mensajes al inglés, miskito y mayagna, imprimiendopanfletos y afiches y realizando transmisiones a través de programas radiales, televisivos, páginas web y redes sociales. 

Asimismo, se conformaron brigadas para llevar a cabo visitas educacionales “casa a casa” en cada una de las comunidades indígenas y afrodescendientes, procurando la captación temprana de personas sintomáticas, así como para el seguimiento responsable y cuidadoso de aquellos que entraron en contacto con personas COVID19 positivas.

 Entendiendo que el COVID-19 no es la única enfermedad epidémica que afecta a las comunidadesindígenas y afrodescendientes, la red de saludcomunitaria implementó su plan anual de luchaen contra del dengue, malaria, leptospirosis, zika y chikungunya, incluyendo acciones comunitariasde limpieza de predios, fumigación y abatización. Asimismo, se realiza la jornada anual de vacunación para prevenir el neumococo y la influenza estacional.

Todo lo anterior se suma a las inversiones sin precedentes del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional liderado por el Comandante Daniel Ortega, Presidente de la República y la Compañera Rosario Murillo, Vicepresidente, que han promovido la construcción de 18 nuevos hospitales públicos desde el año 2007, para un total de 77 a nivel nacional; el incremento en el número de médicos de 2,715 a 6,045, un aumento del 122%, así como de los trabajadores de salud, de 22,083 a 36,649.

El resultado de lo anterior es que Nicaragua estuvo mejor preparada para la pandemia, lo que se evidencia en la tasa de mortalidad de 2.6 muertes por cada 100,000 habitantes comparado a un rango de entre 27.8 y 133.1 en los demás países del istmo centroamericano.

Considerando estos aciertos, así como la voluntad política demostrada del Estado de Nicaragua de continuar trabajando a favor de los Derechos de Pueblos Indígenas-Originarios y Pueblos Afrodescendientes, demandamos que se ponga fin, de una vez por todas, a la práctica nefasta de imponer sanciones ilegales, coercitivas y unilaterales que, en estos tiempos de pandemia, constituyen crímenes de lesa humanidad, condenandoa nuestros pueblos indígenas y afrodescendientes a la pobreza y el subdesarrollo.

 Muchas Gracias Señor Presidente.

 

 

 

Comparte
Síguenos