El jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, descartó este lunes que vaya a renunciar, como lo pide la oposición, por el escándalo de corrupción que involucra al extesorero del Partido Popular (PP) Luis Bárcernas, quien este lunes reconoció ante el juez que es el autor de los papeles manuscritos en los que se refleja una contabilidad paralela en el partido y le entregó varios documentos que inculpan a Rajoy.
"Voy a cumplir el mandato que me han dado los españoles", dijo Rajoy en la conferencia de prensa, durante la cual afirmó que el "estado de derecho no se somete a chantaje".
Rajoy llamó a la estabilidad institucional para justificar este asunto y afirmó que "España es un país serio y yo quiero que siga siéndolo". El también presidente del PP sólo respondió dos preguntas sobre el caso Bárcenas, lo que fue considerado por los periodistas como "escasez de información oficial".
Según la prensa internacional, el jefe de Gobierno llevaba escrita la respuesta de una pregunta pactada con el diario ABC, negándole el turno al el diario El Mundo y la agencia EFE.
En España, "hay un Gobierno estable que va a cumplir con su obligación" y "que nadie piense que vamos a distraernos de nuestro propósito de transformar el país, sacarlo de la crisis", dijo.
Agregó que "un presidente del Gobierno no puede estar saliendo cada día al paso de insinuaciones, rumores o informaciones interesadas de todo tipo que se vayan publicando" al referirse a los documentos publicados por el diario El Mundo, que le implicarían en el caso Bárcenas.
Este domingo, El Mundo publicó unos mensajes telefónicos presuntamente intercambiados por Rajoy y Bárcenas, quien este lunes testificó otra vez ante el juez Pablo Ruz, que lleva el caso y quien el pasado 27 de junio le impuso al extesorero prisión incondicional y sin fianza por el riesgo de fuga.
Tras casi cinco horas de declaración, el extesorero del PP reconoció por primera vez ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, que es el autor de los papeles manuscritos en los que se refleja una contabilidad oculta en el partido, informan fuentes jurídicas. El imputado aportó además numerosa documentación, incluido un pendrive con pruebas de pagos sin declarar a varios receptores, entre los se encuentra el jefe del Gobierno español.
"A Rajoy y (María Dolores) Cospedal (secretaria general del PP), les hice entregas en efectivo en 2008, 2009 y 2010 ", afirmó Bárcenas en su interpelación. En concreto, ha asegurado que pagó 25 mil euros en marzo de 2010 a Rajoy y otros 25 mil a Cospedal en billetes de 500 euros en un sobre marrón.
Bárcenas ha reconocido que todos los ingresos en la cuenta de donaciones del partido son pagos fraccionados de los donantes que aparecían en los papeles que investigaba el Juzgado (siete constructores), para eludir la ley. El imputado reconoció el pasado fin de semana que el PP lleva 20 años financiándose de forma ilegal a través de la recepción de donaciones aportadas por empresarios interesados en conseguir la adjudicación de obras públicas, según publicó El Mundo.
En marzo pasado, entre 500 y mil personas se manifestaron ante la sede del PP en Madrid (capital) para protestar contra la corrupción con gritos de "ladrones dimisión" y "Rajoy dimisión".