Durante una ceremonia religiosa, dirigida por el Arzobispo de Managua Leopoldo Brenes, tres jóvenes fueron ordenados diáconos este sábado, bajo la bendición del espíritu santo.
Donald Savallos, Eliseo Vargas y Luis Fernando Elvir, este último de origen hondureño, prometieron lealtad al arzobispo y la iglesia católica, en la que servirán en cuerpo y alma.
Monseñor Leopoldo Brenes, agradeció especialmente a los padres de los nuevos diáconos, por estar tras de ellos “como un signo de esa protección que también han tenido, ese acompañamiento que ellos han venido viviendo desde el mismo momento de su nacimiento”.
Brenes aseguró que ha podido seguir muy de cerca a Donald, Eliseo y Luis y ha logrado compartir con sacerdotes laicos, de las emociones que le embargan al momento de ordenar a seminaristas diáconos y a estos últimos como presbíteros. “Les decía que mis sentimientos como pastor, es ordenar a quien conozca y quiero conocerlos no solamente por referencias que me pueden dar, si no, por la experiencia de ese comunicarme con ellos y conocer sus sentimientos”, aseguró.
“Es verdad que el obispo tiene esa confianza plena en aquellos sacerdotes a quienes se les ha encargado el seguimiento, el discernimiento y la formación de estos aspirantes a las ordenes sagradas, pero también para mí ha sido una experiencia el conocer el sentimiento de nuestros fieles, conocer el sentimiento de nuestros sacerdotes con relación a los candidatos”, agregó.
Asimismo, aseguró que los jóvenes que recién reciben su orden, viven experiencias muy hermosas, desde el mismo momento de que sintieron el llamado del Señor Jesucristo. “Y allí (en el seminario), poco a poco ir creciendo con el apoyo de sus forjadores, en ese discernimiento del llamado”, manifestó.
En ese sentido, hizo hincapié en los designios divinos por los cuales los nuevos diáconos profundizan más en los senderos del catolicismo. “No es parte de un concurso en el cual hemos participado para ser miembros de este presbiterio, sino que hay algo especial y grande dentro del sacerdocio ministerial: que somos llamados por el Señor”, explicó.
